El órdago de Wanda a Manuela Carmena ha surtido efecto. El Ayuntamiento de Madrid permitirá ahora al grupo chino desmontar parte de la fachada del Edificio España a condición de que no abandone el proyecto.
Los planes de la compañía que preside Wang Jianlin pasaban por convertir el histórico edificio madrileño, actualmente abandonado, en un hotel de lujo y en un centro comercial. Para llevar a cabo la obra, Wanda pretendía desmontar la fachada principal "piedra a piedra" para reconstruirla de forma "exacta" después. Los nuevos propietarios del inmueble explicaron que ésta era la opción "legal más segura".
El Ayuntamiento de Madrid se negó en rotundo, insistiendo en que la fachada tenía que mantenerse, tal y como se estableció por contrato. El impedimento de Carmena provocó que el grupo chino decidiera abandonar el proyecto y poner el inmueble a la venta.
La carta a Wanda
Ahora, Carmena da marcha atrás. En un último intento por no dejar escapar un proyecto de tal envergadura para la capital, la alcaldesa madrileña ha enviado una carta a Wanda en la que le hace una serie de concesiones.
Según una carta, con fecha del 6 de abril, a la que ha tenido acceso la publicación Bezz, el consistorio madrileño permitirá a Jianlin derribar "puntualmente" la fachada principal del edificio. En la misiva aseguran que "cuando en el transcurso de la ejecución de las obras se compruebe que puede verse afectado de manera puntual algún elemento de la fachada protegida (...) podrá solicitarse en este caso su desmontaje y posterior reconstrucción, con los mismos materiales, dimensiones y forma que tenía en origen".
La carta está firmada por Manuela Carmena, el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, y por la primera teniente de Alcalde, Marta Higueras.
Ahora la pelota está del lado de Wanda que, aunque su intención era desmontar la fachada entera, podría encontrar en esta concesión una alternativa viable para continuar con el proyecto.