Marzo suele ser un mes positivo en materia laboral debido a la proximidad o celebración de la Semana Santa, con el consiguiente repunte de la contratación en el sector turístico. El mes pasado no ha sido diferente y, aunque los datos de paro y afiliación han sido ligeramente peores a los de hace un año, el mercado laboral mejora con respecto a febrero, culminando así un trimestre muy similar al de finales de 2015. Es decir, España ha logrado mantener el ritmo de creación de empleo a pesar del actual contexto de incertidumbre política que sufre el país.
Por un lado, el paro bajó en 58.216 personas, situando el volumen de desempleados en un total de 4.094.770. Se trata del tercer mejor registro en un mes de marzo desde el inicio de la serie histórica, en 1996. Únicamente en marzo de 2002 y de 2015 se registraron recortes del paro de mayor cuantía, de 66.804 y 60.214 desempleados, respectivamente. En los últimos doce meses, el paro acumula un descenso de 357.169 personas (-8,02%).
La clave, sin embargo, consiste en analizar los datos una vez eliminado el efecto calendario para, de este modo, descontar el impacto coyuntural de la Semana Santa. Así, el paro desestacionalizado bajó en 45.466 personas en marzo, más que en febrero, con lo que la reducción del desempleo se aceleró.
Como resultado, España baja ya del umbral de los 4 millones de parados por primera vez desde 2010, en términos desestacionalizados, tal y como avanzó Libre Mercado. El mercado laboral ha tardado tres años en bajar de los 5 millones de desempleados hasta la cota de los 4 millones.
Si se mantiene la tendencia actual, la cifra oficial de parados podría descender de los cuatro millones en mayo e incluso en abril, lo cual tampoco sucedía desde agosto de 2010.
Impulso del sector servicios
La Seguridad Social, por su parte, ganó una media de 138.086 cotizantes respecto a febrero, hasta situar el número total de ocupados en 17.305.798.
Se trata también de un aumento algo inferior al de 2015, cuando se ganaron 160.579 cotizantes, pero salvando ese año y el de 2007 (+142.954 afiliados), el pasado marzo arroja el mejor de afiliación de la serie histórica. En el último año, el sistema ha ganado 472.998 afiliados, lo que se traduce en un crecimiento interanual de la afiliación del 2,81%.
Pero lo mejor es que, en términos desestacionalizados, la creación de empleo aumentó 59.161 personas en el último mes, un ritmo superior al de febrero. El sector servicios explica casi exclusivamente este crecimiento, pues tanto el empleo en la industria como en la construcción apenas aumenta.
Se mantiene el ritmo de creación de empleo
Como resultado, el mercado laboral ganó tracción en el primer trimestre del año: la afiliación desestacionalizada creció a un ritmo del 0,8% entre enero y marzo, frente al 0,7% de finales de 2015. Y ello, a pesar de la inestabilidad política.
Pese a ello, si se excluye del total el empleo agrario, la tendencia refleja una leve desaceleración, con un crecimiento trimestral del 0,59% frente al 0,74% del anterior, en línea con el reciente deterioro de la confianza del consumidor -cayó otros 2,6 puntos en marzo, hasta situarse en 92,6, tras bajar en enero y febrero-.
Así pues, unas centésimas arriba o abajo, España sigue creando empleo a inicios de 2016 a un ritmo muy similar el de finales de 2015, sin que se observe, al menos por el momento, ningún impacto significativo como consecuencia de la incertidumbre política.
En perspectiva, el crecimiento actual del empleo duplica el del promedio histórico.
