El futbolista Iker Casillas ha rechazado la solución presentada por Bankia para devolver la inversión a los minoristas afectados por la salida a Bolsa de la entidad, con lo que continúa así su reclamación por la vía judicial para recuperar su dinero.
Fuentes conocedoras del proceso judicial del deportista consultadas por Servimedia recordaron que tiene abiertos dos juicios. En primer lugar como inversor particular por una cuantía de unos 240.000 euros y otra a través de una empresa de su propiedad por otros 240.000 euros.
De este modo, los jueces tendrán que decidir si dan o no la razón a la parte demandante y Bankia debe reembolsar la citada cuantía, así como el interés que le corresponda.
Casillas compareció a principios de octubre de 2015 en rueda de prensa para anunciar que se había puesto en manos del bufete Arriaga Asociados para tratar de recuperar su inversión al acudir a la Oferta Pública de Suscripción (OPS) de acciones del banco en julio de 2011.
Fuentes del citado bufete consultadas por Servimedia evitaron ofrecer ningún detalle sobre el proceso judicial del futbolista ni su decisión en relación a la solución dada por Bankia y se remitieron a las declaraciones efectuadas por el deportista en la citada rueda de prensa, en las que aseguraba haber sido "engañado" con su inversión.
Pero, según ha podido saber Servimedia, el exportero del Real Madrid ha desistido de aceptar la propuesta de Bankia del 100% de su inversión, a lo que sumaría un 1% anual de intereses compensatorios anunciados por la entidad.
En este caso concreto, si Casillas renunciase al proceso judicial y aceptase la solución de la entidad, recuperaría los 480.000 euros más otros 24.000 euros, es decir, un 5% más sobre su inversión, puesto que han pasado cinco años desde la adquisición de las acciones. Además, Bankia se ha comprometido a hacerse cargo de las costas que pudiesen derivarse del juicio.
No obstante, al continuar con el proceso judicial, el cancerbero deberá afrontar el gasto en abogados de los dos procesos judiciales abiertos. Pero como parte positiva, si el juez le diese la razón, Casillas recibiría una mejor compensación, puesto que el tipo de interés de demora se sitúa próximo al 4% anual, con lo que percibiría alrededor de 100.000 euros en concepto de intereses.
Durante el encuentro con la prensa en el mes de octubre, el portero del Oporto explicó que se había puesto en contacto con Arriaga tras escuchar un anuncio en la radio porque éste "estaba intentando ayudar a la gente" y "creo que como ciudadano tengo el mismo derecho a intentar recuperar mi dinero".
"Tengo el derecho a pelear por algo que es mío. Y no creo que a nadie le importe la cantidad que meta o deje de meter", aseveró entonces el futbolista, que se convirtió en la imagen de un spot en televisión y una importante campaña publicitaria del bufete.
Preguntado sobre si cobraría por prestar su imagen en esta campaña publicitaria, Casillas quiso dejar claro que lo hizo de manera desinteresada. "Lo que hemos hecho es un vínculo con la Fundación Iker Casillas", destacó, tras explicar que parte del dinero recuperado se destinará a los proyectos que desarrolla su fundación.