Los inversores sacaron de España 9.800 millones de euros en noviembre, más del doble de lo que retiraron en octubre (4.600 millones) y frente a los 10.600 millones que invirtieron en el país durante el mismo mes del año anterior, según la balanza de pagos que publica el Banco de España. La salida o entrada de capitales es un saldo que resulta de tener en cuenta lo que los inversores españoles invierten fuera del país y lo que los extranjeros destinan a España en ese mismo periodo.
En el acumulado de los once primeros meses, los inversores han sacado de España 51.200 millones de euros, en contraste con los 6.500 millones de euros que sacaron en el mismo periodo del año precedente. En el conjunto de 2014, los mercados retiraron del país 8.200 millones.
En el desglose de los datos, los 9.800 millones que los inversores sacaron de España en noviembre se produjeron por la retirada de 7.400 millones en las inversiones de cartera, como resultado tanto de las desinversiones de los no residentes como de las inversiones de residentes en el exterior. También contribuyó la retirada de 2.100 millones en otras inversiones (préstamos, repos y depósitos).
En cambio, las inversiones directas no sufrieron en noviembre ningún cambio, mientras que en derivados financieros los inversores retiraron de España 300 millones de euros. De esta forma, la posición deudora neta del Banco de España frente al exterior registró en el undécimo mes del año un aumento por importe de 11.700 millones de euros.
Durante el año 2014, los inversores sacaron de España 8.200 millones de euros, frente a las inversiones por importe de 73.600 millones de euros que realizaron durante el ejercicio 2013, gracias a la mejora de la economía española y la mayor confianza en la misma, que llevó a los mercados a inyectar esta cantidad en España después de que en 2012 sacaran 173.191 millones de euros.
A falta de un mes para cerrar el ejercicio 2015, los datos ofrecidos por el Banco de España apuntan a que también durante el pasado ejercicio los inversores habrían sacado del país una cifra importante, que hasta noviembre asciende a 51.200 millones de euros, seis veces más que lo que retiraron un año antes.
Los inversores "empiezan a asustarse"
Por su parte, las grandes inmobiliarias aseguran que los inversores internacionales están "empezando a asustarse" ante las incertidumbres políticas del país, al que "empiezan a mirar con mayor grado de prudencia". Así coincidieron en señalarlo el presidente de la socimi Merlín, Ismael Clemente, el consejero delegado de Colonial, Pere Viñolas, y el consejero delegado dela promotora Neinor, Juan Velayos.
"Que Dios coja confesado a quien tenga que salir al mercado a financiarse mientras dure esta incertidumbre", aseguró el presidente de Merlin. Para Ismael Clemente, España debería registrar en 2016 un volumen de inversión similar al de 2015, cuando alcanzó máximos de los últimos años, "en ausencia de externalidades políticas". "Con externalidades políticas, con todo este Gran Hermano que vivimos, será inferior, porque entre otras cosas se nos va a ir medio año", añadió.
El primer ejecutivo de Colonial, de su lado, avisó de que "España debe seguir siendo un foco de inversión si no se estropea por otras motivaciones", en referencia a la incertidumbre sobre la formación del nuevo Gobierno.
"Todavía esperamos que triunfe la cordura ante los protagonismos y los personalismos y se nos siga viendo como un país core por los inversores y empresas internacionales", apuntó Clemente durante una jornada sobre las tendencias del sector inmobiliario organizada por PwC.