Las acciones de Repsol lideraron las subidas en el Ibex 35 tras dispararse más de un 5% después de anunciar el miércoles que realizará unas provisiones contables extraordinarias por unos 2.900 millones de euros en sus resultados del ejercicio 2015 y que adoptará medidas adicionales para adaptarse al actual escenario de caída de los precios del crudo.
En concreto, los títulos de la petrolera cerraron la sesión, marcada por las caídas en el selectivo por los descensos del sector bancario, con un rebote del 5,3%, para repuntar hasta los 9,29 euros, después de haber llegado a lo largo de la sesión a subir más de un 9%. Además de su anuncio al mercado, también se beneficiaba Repsol de la subida en el precio del crudo en la jornada, con el Brent situado al cierre de la sesión bursátil por encima de la cota de los 34 dólares por barril.
Repsol anunció que realizará unas provisiones por 2.900 millones de euros que supondrán que sus cuentas del ejercicio 2015 arrojen unas pérdidas estimadas de unos 1.200 millones de euros. El grupo señaló que estos saneamientos "podrán revertirse positivamente en las cuentas de resultados de próximos ejercicios, cuando cambie el escenario de precios".
Además, Repsol reducirá en un 20% adicional las inversiones totales previstas para el ejercicio 2016, situándolas en torno a los 4.000 millones de euros. Junto a estas medidas, la petrolera también ha acordado acelerar y aumentar las sinergias derivadas de la integración de Talisman, así como el programa de desinversiones no estratégicas.
El mercado aplaude los ajustes
De esta manera, el mercado valoró positivamente las medidas adoptadas por el grupo en su primer examen, respaldado también por las subidas en el precio del petróleo en la sesión. También los analistas mostraron su confianza en que las medidas adoptadas por Repsol para adaptarse al actual escenario de caída en los precios del crudo sirvan para convencer a las agencias de calificación.
En concreto, los analistas destacaron la fortaleza de los resultados obtenidos en el cuarto trimestre por el grupo, con un beneficio neto ajustado que se situará en unos 450 millones de euros, lo que supone un aumento de más del 20% respecto al último trimestre de 2014, así como la reducción de la deuda neta en más de 1.000 millones de euros en 2015 respecto al año anterior.
En un informe, los analistas del Santander consideran que la mejora de la eficiencia operativa y las medidas para reducir el endeudamiento "ayudarán a convencer a las agencias del compromiso de Repsol con un rating de grado de inversión". Sin embargo, algunos analistas ven necesario un giro de timón en la política de dividendos de la compañía o la opción de una posible desinversión en su posición del 30% en el capital de Gas Natural Fenosa.
A este respecto, los analistas de Morgan Stanley, que valoran las medidas adoptadas por Repsol para mejorar su estructura financiera, aunque apuntan que el grupo necesitaría un precio del petróleo en la franja de los 35-40 dólares por barril, consideran que una venta parcial de su participación en Gas Natural Fenosa ayudaría a Repsol a "aliviar" sus preocupaciones de balance.