La deriva que ha tomado el proceso independentista le pasa factura a Artur Mas. El presidente en funciones de la Generalidad ya ha perdido el apoyo de las patronales empresariales y ahora, son algunas de las grandes familias catalanas las que le dan la espalda.
Empresarios como Grifols, Godó, Carulla o Esteve, tradicionalmente muy cercanos a Mas, se están distanciando de su partido, según el Economista. Eso sí, Mas todavía contaría con los apoyos de otros empresarios, como el presidente del Puerto de Barcelona, Sixte Cambra.
La polémica negociación con la CUP, un partido anticapitalista y antisistema, que va en contra de la naturaleza de cualquier empresa, es el motivo principal de este distanciamiento.
Recordemos que Víctor Grífols, que se ha caracterizado por ser uno de los empresarios que más ha defendido el desafío independentista de Mas, transladó su sede de Cataluña a Irlanda hace unos meses
Grifols animaba en 2014 al presidente de la Generalidad a no arrugarse por las críticas y a actuar con "firmeza y determinación" sobre la consulta soberanista. En respuesta, Artur Mas agradecía a Grífols su "valentía" y ponía a la compañía como ejemplo a seguir.