A falta de los datos que pueda arrojar el mercado laboral en el último trimestre del año, ya es posible hacer un primer balance provisional en materia de empleo de la presente legislatura. Para ello, es preciso comparar la evolución que han registrado el paro y la ocupación durante el último mandato de José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) y el actual Gobierno que preside Mariano Rajoy (PP), período que, sin duda, ha estado marcado a fuego por la crisis económica.
No en vano, conviene recordar que, si bien España sufrió una fuerte recesión en 2009, con una caída del PIB del 3,6%, y otra algo más suave en 2011 (-0,6%), durante los últimos años de Zapatero en el poder, la contracción de la economía nacional continuó en 2012 (-2,1%) y 2013 (-1,2%), con Rajoy ya gobernando, para luego empezar a crecer.
Los datos hablan por sí solos. Según la última Encuesta de Población Activa (EPA), España todavía sufre una tasa de paro del 21,18%, lo cual se traduce en un total de 4,85 millones de desempleados, mientras que el número de ocupados se sitúa en 18,05 millones. Es la primera vez que el paro baja del umbral de los 5 millones de personas y supera los 18 millones de ocupados desde 2011.
De hecho, a la espera de lo que suceda en el cuarto trimestre, Rajoy ya puede presumir de que España cuenta hoy con 436.500 parados menos de los que dejó Zapatero, lo que supone un descenso del 8,3%, mientras que la tasa de paro ha caído en 1,4 puntos (-6%), desde el 22,56% del último trimestre de 2011 hasta el 21,18% del pasado trimestre.
Sin embargo, no sucede lo mismo con el empleo, ya que, por el momento, el número de ocupados sigue siendo inferior en 104.300 personas (-0,6%) al registrado a cierre de la anterior legislatura. Esta divergencia se explica, en parte, por el descenso que ha experimentado la población activa en los últimos cuatro años, con cerca de 540.000 personas menos en edad y disposición de trabajar.
Así pues, en principio, el PP puede afirmar que su Gobierno ha logrado reducir ligeramente la tasa de paro, al bajar del 22,6% al 21,2%, manteniendo el nivel ocupación más o menos intacto. Es decir, España no ha creado empleo con Rajoy, pero tampoco lo ha destruido a pesar de la recesión sufrida en la primera mitad de su mandato.
Sin embargo, las diferencias entre uno y otro gobierno saltan a la vista cuando se analiza la evolución concreta que ha experimentado el mercado laboral español durante la última legislatura del PSOE (del segundo trimestre de 2008 al último de 2011) y la actual del PP (desde el cierre de 2011 hasta hoy).
Balance laboral de Zapatero
Tras el estallido de la crisis, con Zapatero en el poder, el número de parados se disparó en más de 2,9 millones de personas, un aumento del 121,6%, tras pasar de 2,38 millones a casi 5,29 millones en la pasada legislatura.
Como resultado, la tasa de paro se duplicó, al subir del 10,36% al 22,56%.
Asimismo, la anterior legislatura se saldó con la destrucción de casi 2,5 millones de empleos, un desplome del 12,1% en el nivel de ocupación, ya que el número de trabajadores bajó de 20,65 millones a un total de 18,15 millones.
Balance laboral de Rajoy
Por el contrario, y a la espera de lo que suceda en el último trimestre del año, la legislatura de Rajoy arroja unos 435.500 parados menos en comparación con Zapatero (-8,3%).
Como consecuencia, la tasa de paro ha caído en 1,38 puntos (-6,1%), al bajar del 22,56% existente a cierre de 2011 al 21,18% del tercer trimestre de 2015.
Por último, el número de ocupados ha descendido en 104.300 personas durante el presente mandato, lo que equivale a una destrucción laboral del 0,6%, al bajar de un total de 18,15 millones a 18,05 millones.