Muchas de las pequeñas y medianas empresas que operan en Grecia temen echar el cierre por la recesión y el corralito bancario decretado a finales del pasado junio. En concreto, el 30% de los empresarios avanzan que corren el riego de cerrar en los próximos seis meses, según una encuesta realizada por la patronal helena de profesionales comerciantes.
El número de negocios en riesgo ronda los 63.000, que, en caso de cierre, conllevaría la destrucción de 138.000 puestos de trabajo, de los cuales unos 55.000 serían asalariados. En el primer semestre del año, las pérdidas de empleo en las pymes helenas ascendieron a 25.000.
Según el informe, más del 40% de los negocios se enfrentan a dificultades para pagar los sueldos, y el 25% tuvo que reducir los salarios durante el primer semestre. Asimismo, el 41% de los encuestados avanzan que es probable que tengan que aplicar nuevos recortes salariales o de horas de trabajo de aquí a finales de año.