A pesar de la rebelión interna que sufre Syriza, todo apunta a que el Parlamento griego aprobará las medidas de urgencia que ha exigido la Eurozona como paso previo para acordar el tercer "rescate". No obstante, la situación se antoja más complicada en otras cámaras del Viejo Continente que también van a someter a votación el acuerdo anunciado el pasado lunes.
Cierto es que no se esperan grandes sobresaltos en Austria, Estonia o Francia. Más exigente será la votación en Alemania, aunque todo apunta a que el Bundestag dará "luz verde" a un acuerdo que ha generado mucho debate en el país teutón.
No obstante, los principales frentes abiertos están en otros tres países. En primer lugar está Finlandia, donde el partido euroescéptico lleva años pidiendo que Grecia salga de la moneda única. Ya en las reuniones celebradas en Bruselas quedó claro que el Ejecutivo de Juha Sipila no ve con buenos ojos el tercer "rescate", por lo que la sesión parlamentaria será intensa.
Tampoco en Letonia hay un panorama fácil. El país báltico aún no tiene fecha para la votación parlamentaria sobre el nuevo programa. Además, el gobierno de Laimdota Straujuma ha explicado a los medios de comunicación europeos que la aprobación se antoja complicada.
Otro escenario complejo es el de Eslovaquia. Aunque las leyes nacionales no obligaban al gobierno a hacerlo, la Administración que encabeza Robert Fico ha optado por someter el acuerdo a una consulta parlamentaria en la que podría haber sorpresas.
Protocolo de emergencia
Si cualquiera de estas tres votaciones descarrilase el acuerdo, las instituciones europeas se verían obligadas a invocar un protocolo de emergencia bajo el cual no sería necesaria la unanimidad de los gobiernos de la Eurozona, sino una mayoría cualificada que, en la práctica, se daría siempre que no hubiese oposición por parte de Alemania, Francia e Italia.