El Banco Internacional de Pagos, conocido como BIS por sus siglas en inglés, ha dedicado un exhaustivo informe a los costes económicos de las deflaciones. Firmado por Claudio Borio, Magdalena Erdem, Andrew Filardo y Boris Hofmann, los autores examinan la relación entre la evolución del crecimiento y las tendencias en los precios.
El documento, elaborado con datos de 38 economías desarrolladas y emergentes, analiza el periodo comprendido entre 1870 y la actualidad. El 18% de la etapa considerada por el BIS ha albergado situaciones de deflación, por lo que la caída de los precios no es una anomalía.
Más crecimiento en periodos de deflación
De acuerdo con la investigación de Borio, Erdem, Filardo y Hofmann, el crecimiento medio durante el periodo observado es del 2,7%, si bien esta cifra asciende al 3,2% en los años de deflación y cae al 2,1% en periodos prolongados de cierta inflación. Este hallazgo contradice la idea de que la caída de los precios es incompatible con el crecimiento: de hecho, el estudio del BIS apunta lo contrario.
El documento también analiza el vínculo entre el llamado "efecto riqueza" y el crecimiento. Los banqueros centrales que defienden medidas monetarias más expansivas suelen argumentar que un aumento de los precios inmobiliarios y una racha alcista en las bolsas animan el PIB.
Sin embargo, el BIS subraya que, tras analizar periodos de máximos en los precios de estos activos, se puede concluir que el crecimiento medio en los cinco años siguientes fue un 10% inferior al promedio.
El BCE no debe actuar
En esta línea, el informe del BIS subraya que existe una "deflación buena" que no debe ser combatida por los banqueros centrales. Se trata de la caída de precios alimentada por una mayor competencia o una caída en el precio de las materias primas. El escenario actual obedecería al segundo de estos dos factores, por lo que las políticas expansivas del Banco Central Europeo no estarían justificadas.
Puestos a tumbar mitos, el BIS también analiza el historial japonés: el país nipón ha atravesado varios periodos de deflación entre 2010 y 2013, pero el estudio del Banco Internacional de Pagos afirma que, a pesar de esta situación, el crecimiento acumulado llegó al 10%, cerca del 12% registrado en Estados Unidos.