Es la última locura del gigante sueco del mueble: hacer de una sala de cine una gran y acogedora habitación. Es el experimento que ha hecho Ikea en Moscú. Han decidido amueblar un cine para hacerlo más vistoso y cómodo.
Los ciudadanos rusos podrán disfrutar de esta experiencia hasta el próximo 14 de diciembre según el portal marketingdirecto.com.
Para conseguir este espectacular entorno, Ikea eliminó las butacas del cine, creó falsas paredes e instaló distintas camas y sofás con sus cortinas, lámparas, colchones, cojines, alfombras, mesillas, mantas, nórdicos, fundas nórdicas y otros de sus míticos detalles que la han hecho famosa.
No es la primera vez que la empresa sueca tiene una idea tan original. En 2010 la enseña de muebles preparó un dormitorio gigante en París, en la sala de conciertos Olympia, donde se proyectaron un concierto de Abba y el largometraje Millenium.