Los catedráticos de Economía Vincenç Navarro y Juan Torres han sido designados por Pablo Iglesias para elaborar el "plan de choque de rescate ciudadano" que Podemos aplicaría en sus primeros meses de gobierno en caso de que llegase al poder.
La idea, según explicaron ambos la semana pasada, consiste en diseñar "el diagnóstico, las líneas estratégicas de actuación y propuestas concretas de gobierno que a nuestro juicio se pudieran llevar a cabo en el marco de una legislatura; no un desideratum sino un programa de acciones de posible realización como parte de un proyecto de profunda transformación social".
Navarro y Torres están muy ligados al pensamiento de extrema izquierda y, de hecho, sus propuestas económicas contra la crisis son casi idénticas a las que defiende Podemos. No por casualidad han escrito varios libros juntos, contando incluso con la colaboración de Alberto Garzón, uno de los grandes referentes de Izquierda Unida. De hecho, Torres es considerado como uno de los mentores del joven Garzón.
Pero la prueba más evidente de su radicalismo es su firme apoyo a la dictadura comunista de Cuba y al régimen bolivariano de Venezuela. Tanto es así que Navarro trabajó como asesor de Fidel Castro, mientras que Torres asesoró a Hugo Chávez.
Navarro y la dictadura de los Castro
Navarro señala en su biografía que, entre otros muchos gobiernos, ha asesorado al "gobierno cubano (en su reforma sanitaria)" y al "gobierno de Unidad Popular de Chile" que presidió Salvador Allende a principios de los años 70. En una de sus habituales columnas en el diario Público, bajo el título Cuba, la vilipendiada, señalaba lo siguiente:
Fui de los primeros científicos que trabajaban en EEUU que ayudaron a la Revolución Cubana en sus inicios, ayudando a su gobierno en el desarrollo de su excelente servicio nacional de salud, del que incluso expertos de cariz conservador han reconocido su singularidad y ejemplaridad.
Pese a ello, Navarro defiende una mayor apertura democrática en Cuba...
Ni que decir tiene que hubo también dimensiones criticables (mis colegas cubanos me llamaban cordialmente el "hipercrítico") pues creo que la atracción enorme que ha tenido, con razón, la Revolución Cubana en el mundo del subdesarrollo hubiera sido incluso mayor si hubiera permitido un nivel más grande de libertades con mayores expresiones de instrumentos democráticos.
Aunque con matices, ya que culpa, en parte, a EEUU de la ausencia de democracia que sufre la isla bajo el gobierno de los hermanos Castro desde hace ya casi medio siglo.
Ahora bien, los que acusan al gobierno cubano de falta de democracia carecen de credibilidad a no ser que se opongan a la enorme hostilidad del gobierno federal de EEUU, que ha intentado por todos los medios ahogar aquella experiencia y que precisamente ha dificultado el desarrollo de la dimensión democrática de aquella revolución.
Y, por supuesto, Navarro defiende el modelo comunista que ha implementado Cuba a nivel económico y social.
Por lo demás, los datos están ahí. Ha sido uno de los gobiernos con mayor sensibilidad social en aquel continente. Y su política internacional, lejos de ser "terrorista" como la definía el gobierno federal de EEUU […], fue [...] ejemplar, mostrando que la Revolución en Cuba, fruto predominantemente de un enorme esfuerzo del pueblo cubano, ha sido y es una conquista social de todas las fuerzas progresistas del mundo.
Asimismo, en su artículo ¿Ha fracasado el socialismo?, Navarro pone de ejemplo a Cuba, la antigua China comunista y la desaparecida URSS como modelos de progreso y desarrollo superiores al sistema capitalista, ya que, según afirma, los países gobernados por partidos socialistas presentan mejores indicadores de calidad. En el caso concreto de Cuba, señala lo siguiente:
Si miramos los indicadores de salud […], los indicadores de mortalidad en Cuba están entre los mejores de Latinoamérica. Ningún otro país en aquel continente ha visto una mejora tan grande de sus tasas de mortalidad [...], siendo hoy el país con menor mortalidad en aquel continente.
Cuba tiene el nivel de malnutrición más bajo de América Latina, siendo el país que ha disminuido el nivel de malnutrición de una manera más notable desde 1960. Algo parecido ocurre en cuanto a su situación ambiental. El 75% de las viviendas están conectadas a la red de agua potable, uno de los porcentajes más altos de América Latina, siendo uno de los países con menos disentería. Tiene también el nivel de educación más alto de América Latina.
Por ello, tras su exposición, Navarro concluye:
El sistema socialista de producción mostró claramente su superioridad […] Hay pocas dudas, pues, de que, en el contexto del mundo subdesarrollado, donde todavía hoy vive la mayoría de la humanidad, el socialismo es un sistema económico mejor que el capitalismo.
Torres, asesor de Chávez
Por su parte, Juan Torres asesoró al Gobierno de Venezuela, con Hugo Chávez como presidente, a principios de este siglo, como miembro de la Fundación Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPS), en cuya cúpula se sitúan, entre otros, el propio Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, líderes de Podemos.
CEPS ha cooperado "en el diseño de políticas públicas (procesos constituyentes así como en materia legislativa, planes de desarrollo y gestión pública) en Venezuela, Ecuador, Bolivia, El Salvador y Paraguay", según señala en su web. Destaca, sobre todo, su estrecha relación con el régimen bolivariano durante la pasada década, según publicó en su día El País.
Tras el fallecimiento de Chávez, a principios de 2013, Torres le dedicó una columna en el diario Público bajo el título Hugo Chávez en mi recuerdo, en el que detallaba esa estrecha colaboración:
He sentido una profunda tristeza al conocer la muerte del presidente Chávez. Tuve la oportunidad de trabajar en su despacho como miembro de la Fundación CEPS y compartí con él algunos momentos intensos y que perdurarán siempre en mi memoria […]
Me vienen ahora a la memoria los momentos en los que estuve con él y me emociono. Recuerdo los correos de amigas y amigos venezolanos que de vez en cuando me escribían simplemente para decirme que Chávez acababa de recomendar mi manual o alguno de mis libros en algún programa de televisión o en algún mitin o conferencia.
Recuerdo el pánico que sentí cuando me encargó la primera tarea (quería saber mi opinión sobre las medidas de emergencia económica que deberían estar previstas y adoptarse inmediatamente si se daba otro sabotaje o golpe) o el examen tan detallado que me hizo sobre España mientras nos acercábamos a Barajas en uno de los viajes en los que fui en su comitiva, y que me dejó perplejo por lo que él sabía y por las cuestiones que me preguntaba, algunas de las cuales yo nunca había tenido en cuenta [...]
No es fácil hacerse a la idea de la finitud, por muchas veces que se ponga por delante de nosotros inexorable. Y se vive peor cuando se trata de personas a las que queremos o admiramos de un modo especial [...] El pueblo venezolano ha tenido una suerte inmensa al contar con una persona como Hugo Chávez en todos estos años […], una persona excepcional a la que tuve el honor de conocer y de prestarle mi colaboración modestísima y de cuyo ejemplo seguiré tratando de aprender, de su amor extraordinario a las gentes sencillas y de su compromiso con el pueblo.
Son numerosos los artículos en los que Torres alaba, aplaude y defiende la política chavista, a pesar de que Venezuela está sumida hoy en un histórico caos económico y social.
Por último, en una entrevista publicada el pasado domingo en el Diario Sur sobre su reciente colaboración con Podemos, Torres responde así a la siguiente pregunta:
¿Una alternativa al capitalismo y la globalización? ¿Tal cosa es posible?
- Es absurdo creer que el capitalismo se puede cambiar en 4 años. Sí es verdad que en poco tiempo se pueden incorporar medidas de cambio que terminen siendo muy profundas. Cuando un barco entra en el mar, una desviación casi milimétrica puede generar una diferencia de destino de cientos de miles de kilómetros.