España estrenará una nueva fórmula para cuantificar su riqueza a partir del jueves. El nuevo cálculo del PIB incorporará una valoración de actividades ilegales como el tráfico de drogas blandas o la prostitución, la cual supondría, según muchos expertos, una elevación del 3% la riqueza nacional, unos 35.000 millones de euros.
Ese 3% supone un nuevo balón de oxígeno para el Gobierno, que podría contar hasta con 2.400 millones de euros extra para cumplir con el déficit pactado con Bruselas. De esta forma, España sigue el ejemplo de otros socios europeos tras la recomendación de la Comisión Europea para incluir estas actividades en el cómputo de su riqueza.
De esta manera, la prostitución se asemejaría en términos de PIB nominal (a precios corrientes) a sectores como la educación, las actividades artísticas, las telecomunicaciones o el suministro de energía, entre otros, informa Bolsamania.
Peso en el PIB
Es decir, los últimos datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) desglosan por subsectores su aportación al PIB. En este caso, la educación supone un 3,03%, un porcentaje prácticamente idéntico al de las actividades artísticas, entre las que se engloban espectáculos, bibliotecas y todas las actividades deportivas.
Además, el peso de la prostitución en el PIB nominal también sería similar al suministro de energía eléctrica (3,7% según el INE) y superaría a la industria española del petróleo y a todo el sector de la agricultura, que suponen un 2,6% y un 2,4%, respectivamente.
Gasto militar e I+D
De los numerosos cambios metodológicos, los más significativos son el reconocimiento como inversión tanto del gasto en investigación y desarrollo (I+D) y del gasto en los sistemas de armamento. De esta manera, los gastos en I+D se tratan como inversión en activos fijos y por tanto, la depreciación de dichos activos como consumo de capital fijo.
Este cambio supondrá un incremento del PIB respecto al calculado según la metodología de la anterior versión del sistema de cuentas. Además, se incluirán las armas y sistemas de apoyo usados de forma continua durante más de un año en la producción de servicios de defensa.