La inversión extranjera ha caído drásticamente en Cataluña en el segundo trimestre de 2014. En concreto, entre abril y junio, ha recibido un 66% menos de capital foráneo que en el mismo periodo del año pasado, pasando de 787 a 267 millones de euros, según se desprende de los últimos datos facilitados por el Registro de Inversiones del Ministerio de Economía y Competitividad.
Esta cantidad supone un mínimo histórico de inversión extranjera en Cataluña desde que existen datos de este indicador (año 1993), tal y como recoge un informe sobre esta materia elaborado por Convivencia Cívica.
En los primeros seis meses, la inversión extranjera acumulada en Cataluña ha bajado un 60% interanual.
La Comunidad de Madrid, por el contrario, ha recibido 3.039 millones de euros, seis veces más que la región catalana en el mismo periodo.
Todos los grupos de inversores han mostrado su clara predilección en el primer semestre de 2014 por invertir en Madrid frente a Cataluña. Así, tal y como muestra la siguiente tabla, los inversores procedentes de la Unión Europea (UE-27), el grupo cuantitativamente más relevante, ha invertido 2.195 millones de euros en Madrid en el primer semestre de 2014, unas seis veces más que en Cataluña (351 millones). La misma tendencia se constata en los inversores procedentes de todos los continentes y principales áreas económicas.
"La disminución del interés en 2014 por invertir en Cataluña ha sido generalizada por parte de inversores procedentes de las principales áreas geográficas del mundo: europeos (-61%), americanos (-65%), asiáticos (-51%) y del conjunto de la OCDE (-65%)", según el informe.
Además, "esta caída de la inversión extranjera ha afectado a los principales sectores productivos de Cataluña, tales como la industria de manufactura (-77%), la construcción (-66%), las actividades profesionales ( -56%) y de manera muy destacada al sector financiero catalán (-93%)", añade.
Todo estos datos subrayan, según la entidad, que "la incertidumbre y la inestabilidad política generadas por la radicalización del discurso del Gobierno catalán en este año 2014 están pasando factura y contribuyendo a crear un clima de inseguridad y desconfianza entre los inversores extranjeros que han decidido de manera mayoritaria contraer o incluso paralizar sus inversiones en Cataluña".
De hecho, desde finales de 2010, momento en el que CiU tomó posesión del Gobierno autonómico con mención expresa a una hipotética ruptura con el resto del país, los inversores extranjeros han destinado a Cataluña cuatro veces menos que Madrid, a pesar de que el peso económico de ambas regiones es similar.