La semana pasada entró en vigor la nueva Orden de Precios de Referencia, por la que el Ministerio de Sanidad obliga a las compañías farmacéuticas a abaratar más de 4.000 medicamentos financiados por el Sistema Nacional de Salud (SNS).
El precio de referencia es el importe máximo de un medicamento que el Estado está dispuesto a financiar. Estas tarifas son fijadas de forma que el consumidor siempre pueda disponer de un genérico de igual o menor coste.
Cuando el Gobierno anunció esta medida hace varios meses, farmacéuticas y laboratorios recibieron la noticia como un duro golpe. Advertían de que, con la bajada de precios, muchos de los medicamentos que fabrican están por debajo del umbral de rentabilidad.
"El sector farmacéutico no podemos soportar más recortes. Llevamos 14 años bajando precios y en los últimos 5 años la velocidad de bajada ha sido altísima", asegura a Libre Mercado el portavoz de la Secretario General de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), Luis de Palacio.
Según los cálculos del Ejecutivo, con esta medida, se obtendrá un ahorro estimado de 43 millones de euros en medicamentos, de los que 5,62 millones repercutirán directamente en los ciudadanos. Pero las cifras de las farmacéuticas van mucho más allá. Tal y como asegura FEFE, basándose en un estudio de la consultora IMS Health, el impacto real de la imposición de precios para el sector será de 280 millones a precio de venta de laboratorio. lo que implicaría 437 millones a precio de venta al público.
"Estamos sorprendidos por este baile de cifras, algo que no hubiera ocurrido si el Gobierno hubiera aprobado la Orden de Precios con un análisis de impacto económico", dice De Palacio. "Y, precisamente, por ese motivo hemos recurrido la norma", añade.
Dejan de fabricar medicamentos
Ante esta situación, la reacción de la industria no se hizo esperar. La compañía alemana Bayer decidía retirar del mercado su medicamento Reandron, debido a que el texto del Gobierno le obligaba a rebajar su precio un 35%, desde los 93 euros hasta los 57. "Hemos suspendido su comercialización en España porque no podemos asumir el coste que nos imponen, comercializarlo a ese precio es inviable", aseguraban fuentes de la compañía a Libre Mercado.
Un día después, Roche Farma España anunciaba el despido de 100 trabajadores, el 20% de la plantilla, "como consecuencia de los cambios en el entorno y del impacto de las medidas de control de gasto farmacéutico sobre los medicamentos innovadores".
"Esto puede seguir pasando", alerta De Palacio. "Las empresas no pueden seguir fabricando a pérdidas y hechos como éste son indicios de que el sector no puede más".
Subvenciones de 700 euros a las farmacias
Además, De Palacio considera una contradicción que el Gobierno lleve a cabo medidas como ésta y, sin embargo, apruebe otras, como el Plan de Viabilidad Económica Reducida, que otorga a las farmacias con problemas "una subvención de 700 euros al mes".
Para acceder a la ayuda, los establecimientos no deben facturar más de 200.000 euros al año y la declaración del IRPF les debe salir negativa. "Son más de un millar de farmacias las que están en esta situación, lo que significa que es más del 5%", explica De Palacio.
El portavoz de la patronal afirma que el Ejecutivo aprobó este Plan hace año y medio, pero los negocios todavía no han cobrado porque la gestión ha sido cedida a las CCAA, que tiene retenido el pago. "Recortan en el sector farmacéutico, que somos transparentes, y no en el hospitalario, un sector mucho más opaco, donde no se sabe nada de sus cuentas", concluye.