"Todos saben cuán importante es el uso del espacio aéreo ruso para las aerolíneas de distintos países", ha advertido este jueves el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov. Toda una declaración de intenciones si tenemos en cuenta que este miércoles, el presidente ruso, Vladimir Putin firmó un decreto para prohibir la importación de productos agrícolas y alimentarios de los países que han aprobado sanciones recientemente contra dirigentes y entidades rusas. Además, el jefe de Estado ordenó al Gobierno que elaborara una lista de los productos que se verán afectados.
Y esos productos podrían ser los aviones comerciales. Lavrov ha avisado a Occidente que debe pensar en las consecuencias que pueden sufrir sus empresas y ciudadanos debido a las medidas de respuesta de Rusia a las sanciones aprobadas contra Moscú por su apoyo a los separatistas prorrusos que actúan en el este de Ucrania.
Así, según informa Reuters, Rusia ha amenazado con prohibir el uso de su espacio aéreo a las compañías aéreas europeas y estadounidenses que unen Europa con Asia vía Siberia, como respuesta a las sanciones internacionales por la crisis de Ucrania. La medida es grave, según ha reconocido el propio primer ministro ruso, Dimitri Medvedev, ya que la de Siberia es la ruta más corta y el desvío obligaría a las compañías a usar más combustible, con el coste que esto supondría a las compañías.
Rusia tiene prácticamente listo un amplio paquete de medidas de respuesta a las sanciones adoptadas recientemente contra Moscú por Estados Unidos, la Unión Europea, Suiza, Japón y Canadá.
Estados Unidos y la UE (incluida España) han decretado varias sanciones en las últimas semanas contra Rusia, a la que acusan de apoyar a los separatistas prorrusos que se han rebelado contra el gobierno de Kiev en el este de Ucrania.