El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves mantener los tipos de interés del euro en el mínimo histórico 0,15%, donde los situó en la reunión de junio, en la que adoptó un amplio paquete de medidas destinadas a fomentar el crédito a la economía real.
En esta línea, el BCE también ha dejado el tipo de interés aplicable a la facilidad de depósito en el -0,10%, donde lo situó hace dos meses cobrando por primera vez en la historia a los bancos por guardar su dinero, y el tipo de interés aplicable a la facilidad marginal de crédito en el 0,40%.
Los analistas no esperan ningún cambio en la política monetaria de la eurozona en esta reunión "de transición" después de aprobar en junio el conjunto de medidas más ambicioso desde la presentación del programa OMT en septiembre de 2012 y detallarlo en el mes de julio.
De esta manera, la atención se centrará de nuevo en la rueda de prensa del presidente del BCE, Mario Draghi, y la evaluación que haga de los últimos acontecimientos financieros y económicos.
La tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en julio en el 0,4%, frente al 0,5% del mes de junio, según la estimación preliminar de la oficina comunitaria de estadística, Eurostat, que apunta al menor alza de los precios en la región desde octubre de 2009.
Por su parte, la tasa de desempleo en la zona euro se situó en junio en el 11,5%, una décima menos que el mes anterior, cuando registró su nivel más bajo desde septiembre de 2012. España (24,5%) se mantiene como el segundo país con más paro de la UE, sólo por detrás del 27,3% que Grecia registraba en abril.