Las comunidades autónomas no podrán superar el 1% del PIB de déficit este año. Ése era el límite impuesto por Hacienda y se ha ratificado este jueves por la tarde en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que ha tenido lugar en Madrid. Además, los consejeros reunidos con Cristóbal Montoro han acordado el Programa de Estabilidad planteado por el Gobierno y que obliga a las comunidades a mantener los números rojos por debajo del 0,7% en 2015, del 0,2% en 2016 y del 0% en 2017. Eso sí, Cataluña, Asturias, Canarias y Andalucía.
El CPFF es un órgano colegiado en el que están presentes el Gobierno, a través del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, y los consejeros de las 17 comunidades autónomas (aunque a las dos forales no les afectan los acuerdos). Sin embargo, esta disposición tiene truco, porque el Gobierno se reserva la mitad de los votos, por lo que su postura es siempre la que se acaba aprobando, aunque eso no evita que siempre haya algún tipo de negociación entre el Ejecutivo central y los de las regiones.
Por eso, al final los votos tienen más una lectura política. En los últimos años, las comunidades del PP han votado de forma consistente a favor del Gobierno, con alguna excepción, como cuando Madrid protestó por el déficit a la carta aprobado para 2013. Y las regiones socialistas y nacionalistas han sido constantes en su rechazo a las peticiones de Moncloa, aunque en esta ocasión al menos no han abandonado la reunión como en anteriores ocasiones.
Este jueves, en la sede de Hacienda, se esperaba un CPFF más o menos tranquilo y así ha sido. Protestas por la falta de financiación, acusaciones desde Andalucía o Cataluña de asfixia financiera y discusión sobre si otorgar un poco más de margen en el déficit. Al final, pocas novedades. Se aprueba el objetivo para 2015-2017. Se mantiene el 1% para este año con el voto en contra de Cataluña, Andalucía y Asturias y la abstención de Canarias. Y se deniega el déficit a la carta o dar más margen a determinadas regiones. Más o menos lo esperado.
La negociación
En lo que hace referencia a la negociación política, el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha ofrecido a los gobiernos regionales una entrega a cuenta de 3.900 millones de euros. El objetivo de este nuevo fondo sería compensar a las regiones por la pérdida de recaudación que puedan sufrir tras la última reforma fiscal.
El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha accedido a elevar estos anticipos gracias a la mejora de recursos que propiciará la recuperación económica. Asimismo, han asegurado que la liquidación de los anticipos concedidos en el año 2013, que se realizará en el año 2015, se cerrará con un saldo a favor del Estado (en contra de las CCAA) de cerca de 2.100 millones de euros.
En este sentido, varias comunidades autónomas se han quejado durante la reunión del impacto negativo que pudiera tener la reforma tributaria en las arcas autonómicas. La consejera de Hacienda de Andalucía, María Jesús Montero, ha estado a la cabeza de las reivindicaciones. De hecho, a la salida de la reunión ha sido muy dura con la postura adoptada por el Gobierno, no sólo en cuestión del déficit, sino en general, en lo que hace referencia al nuevo sistema de financiación.
Montero ha asegurado que el Gobierno "no tiene calendario" para aprobar el nuevo modelo y ha descartado que éste pueda estar encima de la mesa este año. En este sentido, ha denunciado que la actual financiación es insuficiente para regiones como Andalucía y ha reclamado más fondos.
En lo que tiene que ver con la reforma fiscal, el CPFF ha aprobado la retirada de la polémica Disposición Adicional 18º del Anteproyecto de Ley que situaba los tipos de las comunidades en línea con la bajada del Gobierno. En la práctica, eliminaba las subidas aprobadas en los últimos años. No es que las prohibiera, pero obligaba a las CCAA que quisieran mantener su tipo por encima del general a aprobarlo de nuevo en el parlamento autonómico. Ahora eso ya no será necesario, porque cada uno mantendrá el recargo vigente en la actualidad.
Por ejemplo, un contribuyente que ahora tiene un marginal del 56% (el general es del 52%), verá reducido este nivel 5 puntos (lo aprobado por el Gobierno), al 51% en 2015, pero no al 47% que Hacienda anunció como general la semana pasada, porque su autonomía ha ido aprobando recargos de hasta 4 puntos en la tarifa que se le aplica en los últimos años.