El secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, ha afirmado este miércoles que se volverá a recurrir al Fondo de Reserva de la Seguridad Social para abonar a los pensionistas la paga extraordinaria de julio, aunque no ha precisado la cantidad de la que se dispondrá.
Burgos, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, ha subrayado que el Gobierno seguirá utilizando los recursos de esta 'hucha' mientras persista el déficit en el sistema de la Seguridad Social y sólo para asegurar el pago de las pensiones.
"Mientras la situación de déficit en la Seguridad Social persista, y persistirá durante algún tiempo, será necesario recurrir a esos fondos, pero en la cantidad estrictamente necesaria para pagar las pensiones contributivas del sistema, y no dedicaremos ni un solo euro del Fondo de Reserva a otro objetivo que no sea ése", ha insistido. Burgos ha recordado que la Seguridad Social percibe ingresos durante doce meses pero paga pensiones catorce veces al año, con las dos pagas extraordinarias que abona (una en julio y la otra en diciembre).
"Esos dos momentos son los que nos obligan a hacer acopio de las reservas y dedicarlas a cubrir el desfase que se produzca", ha explicado el secretario de Estado, que ha destacado que en junio, por primera vez en la historia del sistema, se ha sobrepasado la barrera de los 8.000 millones de euros en la nómina de las pensiones.
Burgos ha resaltado que la 'hucha' de las pensiones españolas, que actualmente alcanza los 54.000 millones de euros, es "de las más importantes del mundo" y su cuantía permite afrontar "con absoluta tranquilidad el futuro de un sistema que está atravesando un momento muy complicado".
"La reforma laboral ya está hecha"
Por otro lado, preguntado por la propuesta de la CEOE -aún sin cerrar- de introducir un periodo de prueba de un año en los contratos indefinidos ordinarios, Burgos ha señalado que aunque todas las ideas son "estimulantes desde el punto de vista intelectual" y deben ser escuchadas, la reforma laboral que necesitaba España "ya se hizo". "Las grandes decisiones en materia laboral están ya tomadas", ha subrayado.
"Yo no sé si la patronal se considera o no envalentonada. Mi percepción es que tiene sus propuestas, que son escuchadas pero no siempre atendidas, igual que las de los sindicatos", ha afirmado Burgos al ser cuestionado por si la CEOE estaba "viniéndose arriba" en los últimos tiempos.
En cuanto a los datos de afiliación de junio, Burgos espera que la evolución siga siendo positiva, y ha apuntado que aunque ésta tenga un componente estacional, no hay que "desvirtuar" la mejora de los datos alegando que se hacen muchos contratos temporales y a tiempo parcial. "Ni en los tiempos de bonanza económica que este país vivió todos los contratos eran de extraordinaria calidad", ha recordado.
Bajas por enfermedad
En otro orden de cosas, sobre el Real Decreto que está preparando el Gobierno para mejorar la gestión de la incapacidad temporal, Burgos ha explicado que el objetivo de esta norma es simplificar trámites y minorar las cargas administrativas que soportan empresas y trabajadores, por ejemplo, eliminando "la inveterada costumbre" de tener que ir todas las semanas al médico a refrendar la baja.
"Tendremos un parte de baja, otro de alta y unos tiempos de expectativa de baja para que las empresas puedan adaptarse a esas situaciones", ha apuntado Burgos, que ha recordado que cada año se dedican más de 5.000 millones de euros a las prestaciones por incapacidad temporal, cifra de tal magnitud que "no puede estar exenta de un escrutinio".
"Tenemos la obligación de que la incapacidad temporal llegue a quien lo necesita de verdad, evitando abusos e irregularidades", ha añadido Burgos, para quien el absentismo y la incapacidad temporal "no son términos equivalentes", pues "hay mucho absentismo que no tiene que ver con las bajas".
"Si pagamos una incapacidad, que la pagamos todos, que dure lo que tiene que durar para que el trabajador esté plenamente recuperado, se utilicen todos los recursos a disposición de la sanidad pública, y que la prestación se efectúe con cargo a criterios de transparencia y de absoluto control (...) Quienes critican las reformas debieran esperar a ver su contenido y compartir el objetivo de que los recursos públicos se dediquen a lo que se tienen que dedicar", ha concluido.