El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha defendido hoy la labor del Banco de España, puesta en cuestión por el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y ha asegurado que el origen de la crisis financiera en España estaba en el modelo de gestión de algunas cajas. "No estoy de acuerdo con las declaraciones del presidente de la Comisión Europea sobre la responsabilidad directa del Banco de España en la crisis financiera", asegura el banquero en una nota remitida a Efe.
En este sentido, ha recordado que el supervisor bancario trató de anticiparse con medidas innovadoras, como las provisiones anticíclicas, que exigían a las entidades españolas atesorar un colchón en tiempos de bonanza para encarar mejor el futuro.
En su opinión, el problema más que de supervisión estaba en el deficiente modelo de gobierno corporativo y de gestión que tenían una gran parte de las antiguas cajas de ahorros. Una afirmación que llega el mismo día que Durao Barroso afirmó en un curso en Santander que en España "hubo errores muy importantes de supervisión" y deben ser asumido.
"Siempre que la Comisión Europea preguntaba a las autoridades españolas cómo estaba la banca, cómo estaban las cajas de ahorros, ya que había rumores en el mercado de que no estaban bien, siempre decían que todo estaba perfecto", ha indicado hoy Durao Barroso.
Una tesis que Botín ha querido rebatir al puntualizar que el problema fue el modelo de gestión de algunas cajas de ahorros, con lo que marca distancias entre la labor desempeñada por los bancos y el sector de las que durante años fueron sus principales competidores. "Y a pesar de ello, el coste sobre el PIB del saneamiento de las cajas en España ha sido inferior al de la mayoría de países europeos, como Irlanda, Grecia, Países Bajos, Portugal y Reino Unido" ha sentenciado Botín.