Los primeros indicios de la ansiada salida de la crisis económica española han disparado el gasto en obra pública. Lejos queda ya el discurso del Gobierno abanderando la austeridad. Ahora, las Administraciones Públicas han vuelto sobre sus pasos y empiezan recuperar sus pretensiones constructoras.
Según el último informe de la patronal de las grandes constructoras (Seopan), en los cuatro primeros meses de este año, el Ejecutivo incrementó la licitación de obra pública un 108% en comparación con el mismo periodo de 2013. Así, el presupuesto de las obras que se sacaron a concurso entre los meses de enero y abril alcanzó los 4.437 millones de euros, mientras que el año pasado fue de 2.128 millones.
La mayor parte de las licitaciones aprobadas (el 81%) correspondió a obra civil, entre las que se incluyen carreteras, puertos o ferrocarriles. Dentro de la categoría de transportes, despunta sobremanera el aumento del presupuesto en las licitaciones de carreteras de un 123.485%. Mientras que en los cuatro primeros meses del año pasado, Fomento dedicó a esta categoría sólo 494.000 euros, este año la ha elevado hasta los 609 millones de euros.
Otra de las subidas más destacadas en las cuentas de Fomento viene de la mano de las licitaciones concedidas a Adif. De enero a abril, el coste de los proyectos asignados se elevó desde los 412 millones de euros hasta los 1.387 millones, un 236% más que un año antes. Si incluimos la factura de las adjudicaciones a AENA y a las Autoridades Portuarias, el Ministerio que dirige Ana Pastor ha elevado los 542 millones de euros que desembolsó en 2013 a los 2.142.
Conectar con el AVE y un plan de carreteras
Dentro de las licitaciones otorgadas a Adif, destacan las obras para conectar líneas ferroviarias de toda España con la Alta Velocidad que se han licitado en tan sólo 4 meses. Por ejemplo, el del tramo de Mornforte del Cid-Murcia (188 millones de euros), la conexión Vandellós-Camp de Tarragona (115 millones) con la línea Madrid-Barcelona-Frontera francesa; los 280 millones para conectar Granada o los 640 millones de la línea Madrid-Galicia. Al contrario que Seopan, estas cifras, llevan el IVA incluido.
Sobre las carreteras, el ministerio de Fomento estableció en los Presupuestos Generales para 2014 un gasto total es de 2.153 millones de euros, de los que 1.148 millones corresponden a construcción de nueva infraestructura, 818 a conservación de las carreteras y 187 a convenios con otras Administraciones.
Pero este no es el primer encarecimiento de los contratos públicos desde el inicio de la crisis. Tras 7 años de recortes, el Gobierno cerró 2013 elevando la licitación de obra estatal un 22,9% interanual. En concreto, en 2013, esta partida pasó del mínimo histórico de los 7.442 millones de euros de 2012 hasta los 9.141 millones. Estas cifras contrastan con el récord del gasto en proyectos públicos llevados a cabo en 2006 por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que alcanzó los 46.701 millones de euros.
