A cierre de diciembre del pasado año, los 8.117 ayuntamientos que tiene España repartidos por todo su territorio acumulaban una deuda viva de 35.096 millones de euros. Respecto a 2012, los consistorios españoles sólo consiguieron reducir su endeudamiento en un 0,54%, o lo que es lo mismo, en 193,73 millones de euros.
Aunque estas cifras son más que elevadas, no computan la totalidad de la deuda de los ayuntamientos. Y es que el concepto de deuda viva sólo tiene en cuenta los créditos con cajas, bancos y otros prestamistas. Los créditos comerciales, como son las facturas pendientes con los proveedores, no están dentro de esta categoría.
Como cada año, el Ministerio de Hacienda publica el saldo total de la deuda viva de cada municipio. El Ayuntamiento de Madrid repite como el consistorio más endeudado de España, con 7.035 millones de euros. La larga de lista de obras faraónicas que llevo a cabo Alberto Ruiz Gallardón en su etapa de alcalde tiene gran parte de la culpa de esta factura. Hay que recordar que cuando Gallardón cogió el testigo de su compañero de partido, José María Álvarez del Manzano, la deuda del ayuntamiento de la capital apenas superaba los 1.000 millones de euros.
A Madrid le siguen, de lejos, otras cuatro grandes ciudades. Barcelona es la segunda capital de provincia más endeudada, con 1.110 millones de euros; seguida de Valencia, con 872 millones; Zaragoza, con 861 millones y Málaga con 701 millones. Bilbao se sitúa en el lado contrario de la tabla, con una deuda que apenas supera los 7 millones de euros. Huesca (16 millones), Pontevedra (19 millones), Cáceres (20 millones) y Zamora (21 millones), están detrás de la capital vasca.
Aunque, si queremos averiguar qué parte de la deuda de su ayuntamiento le corresponde a cada uno de sus habitantes, el ranking cambia drásticamente. Al dividir los datos publicados por el Ministerio que dirige Cristóbal Montoro entre el censo poblacional que proporciona el Instituto Nacional de Estadística (INE) surge una insólita lista.
Mientras que cada madrileño debe 2.194 euros del total del pasivo de su consistorio o a cada barcelonés le corresponden 689 euros para saldar la deuda municipal, hay tres pueblos en España cuya deuda per cápita supera los 8.000 euros.
Una casa rural
En primer lugar, se sitúa el municipio burgalés de Monasterio de la Sierra, cuyos habitantes adeudan la friolera de 8.891 euros de media cada uno. Este pueblo lleva varios años ostentando el liderazgo de la lista con una deuda que puede parecer pequeña comparada con el resto de consistorios españoles: 409.000 euros. Pero, esta cuantía es desproporcionada teniendo en cuenta el número de vecinos censados: 46.
¿Cómo puede ser que un pueblo de apenas 46 habitantes tenga unas obligaciones tan altas? El motivo no es otro que la obtención de un crédito para construir una casa rural. El que fuera entonces alcalde del municipio y precursor del proyecto, Jesús María Estevan, ha explicado a Libre Mercado que de esa cuantía, 408.000 euros corresponden a un crédito ICO concedido en 2011. Según el exedil, el crédito fue concedido a pagar en 15 años, con un periodo de carencia de 5 años y a un 0,5% de interés. "La deuda que se nos imputa no es una deuda real porque no estamos obligados a pagar nada hasta dentro de dos años", declara.
Jesús María reniega del título del pueblo más endeudado de España y defiende que llevó a cabo el proyecto porque "el pueblo necesitaba una economía alternativa a la actual, que es la ganadería, como consecuencia de la pérdida de pastos por la construcción del pantano de Castrovido y porque las explotaciones ganaderas son tradicionales y poco rentables".
La famosa casa rural, bautizada como La Casa del Toro, fue inaugurada en septiembre de 2011 sobre una construcción en ruinas propiedad del ayuntamiento. No fue hasta marzo de 2012 cuando empezó a recibir clientela, aunque a cierre de ese mismo año apenas consiguió ingresar 5.000 euros de sus huéspedes. Según informa en su página de Facebook, el lugar tiene capacidad para 12 visitantes en habitación doble y se alquila por 14,58 euros por persona y noche.
En teoría, el pantano de Castrovido iba a ser la construcción que dinamizaría el turismo en la zona y la casa rural serviría para absorber a los turistas. En la práctica, el pantano está sin terminar y las obras se han retrasado hasta, por lo menos, 2017.
"Los jóvenes emigran del pueblo y los que se quedan están en el paro. Algunos han trabajado en la construcción del pantano y lo previsible es que, cuando esta obra se termine, el pueblo pueda tener un impulso turístico. Por ese motivo es fundamental la casa rural", declara el exalcalde.
Jesús María Estevan asegura que el pueblo que estuvo a su cargo tiene un remanente de 22.100 euros para hacer frente a sus gastos y además confía en que con la apertura del pantano su pueblo comience a ingresar 150.000 euros anuales en concepto de IBI.
Jalón y Aguilar
El ayuntamiento cuyos habitantes son los segundos más endeudados de España es Jalón de Cameros, un pueblo de La Rioja de tan sólo 21 habitantes. Mientras que a cierre de 2012 la deuda era de 85.000 euros, a finales del año pasado esta cuantía se elevó hasta los 183.000. Cada uno de sus habitantes soporta un crédito de 8.123 euros. Este periódico se ha intentado poner en contacto con el consistorio para conocer los motivos de esta situación, pero no ha obtenido respuesta.
El tercer ayuntamiento más endeudado de España sí ha querido dar explicaciones. Se trata de Aguilar de Segarra, en Barcelona. Los 242 habitantes de este municipio catalán debían a cierre de 2013 un total de 1,96 millones de euros. Así, la deuda por vecino ascendería a 8.132 euros.
El secretario general del ayuntamiento de Aguilar de Segarra, Josep María, afirma que poseer este tercer puesto en este ranking "es una mera anécdota. Muchos municipios de nuestro alrededor tienen una deuda mayor que nosotros, pero nosotros tenemos menos habitantes".
Josep María explica que el endeudamiento de su cabildo se debe a un crédito hipotecario que se les concedió en 2007 para construir una planta solar. El proyecto se presupuestó en 4 millones de euros de los que 2,2 pertenecen al crédito. "La planta genera unos 600.000 euros al año y cuando en 12 años terminemos de pagar la inversión, empezaremos a recuperar el dinero", defiende el político.