OHL obtuvo un beneficio neto de 60,4 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un descenso del 11,8% respecto al mismo periodo de 2013, afectada por un aumento de los gastos, sobre todos los financieros, según informó la compañía.
El grupo controlado y presidido por Juan Miguel Villar Mir elevó un 2,8% su cifra de negocio entre enero y marzo, que se elevó a 787,1 millones de euros, impulsada por el negocio de construcción, fundamentalmente internacional. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) progresó un 12,2%, hasta 279,6 millones.
A cierre del primer trimestre, OHL registró del negocio internacional el 77,4% de las ventas y la "práctica totalidad" de su Ebitda.
Entre sus principales mercados exteriores destaca Latinoamérica, que generó el 28% del total de la cifra de negocio, Estados Unidos y Canadá (19%) y Oriente Medio (17%). En el capítulo de deuda, el grupo concluyó marzo con una deuda financiera neta de 5.908 millones de euros, importe que arroja un incremento del 6,6% en comparación al cierre de 2013.
Modera la caída en España
Por áreas de negocio, la tradicional de construcción creció un 12,8% en los tres primeros meses, gracias al impulso de la actividad que desarrolla en el exterior, que creció un 16,5% y logró compensar el descenso del 3,4% registrado en España.
Esta caída modera así el desplome del 34,2% que el negocio constructor de OHL se anotó en el mercado doméstico el pasado año. A la conclusión de los tres primeros meses del año, la compañía contaba con una cartera de contratos pendientes de ejecutar por valor de 8.759 millones de euros, un 8,7% superior a la de 2013. El 83,5% de estos proyectos son internacionales.
El negocio de concesiones, de su lado, se contrajo un 13,1% en el trimestre, hasta facturar 105,7 millones de euros. Los ingresos por cobro de peaje en las autopistas que explota en España, México y Chile y Perú crecieron un 11%, pero no pudieron compensar la menor actividad constructora de la filial concesional.
El resto de actividades de OHL (construcción industrial, desarrollos y servicios) redujeron un 23,8% su aportación, que se situó en 94,2 millones de euros, lastradas por la menor actividad industrial "al finalizar importantes contratos y estar aún en fase de lanzamiento otros nuevos proyectos adjudicados recientemente".