El presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), José María Marín Quemada, ha advertido este martes de que en ocasiones las administraciones públicas legislan limitando la competencia y se apoyan en "colectivos o entidades concretas", lo que da lugar a precios más elevados.
"En nuestro país hay un gran número de actuaciones y comportamientos anticompetitivos que tienen su origen en disposiciones de naturaleza legal dictadas por alguna administración", ha recalcado Marín Quemada en la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados.
A su juicio, numerosas regulaciones "dejan mucho que desear" desde el punto de vista de la competencia y han creado "barreras de entrada" en diferentes mercados, lo que se ha traducido en precios más altos para los consumidores en ausencia de dichas trabas.
El presidente de la CNMC ha considerado que estas administraciones (no ha especificado si se refería al Estado, a las CCAA o a entidades locales) llevan a cabo algunas de estas actividades "con el fin de paliar su falta de medios".
Por ello, ha recalcado que el contacto entre la CNMC y las administraciones es "fundamental" tanto para el proceso de elaboración de las normas como para la práctica diaria, ya que deben tenerse en cuenta los efectos de las regulaciones sobre la competencia en el mercado.
Una coordinación que "resulta esencial", ha añadido, con las autoridades de competencia de las comunidades autónomas y las autoridades europeas.
Por otro lado, a su juicio, en los sectores regulados, y concretamente los llamados estratégicos, se produce un "solapamiento de ordenamientos demasiadas veces contradictorios".
Además, Marín Quemada ha asegurado que "por desgracia" hay numerosos cárteles, presentes "desde hace tiempo" en España y que cuentan "con una cierta tradición".
El responsable de la CNMC ha dado cuenta del próximo Plan Estratégico CNMC, que incluye entre sus 16 acciones reforzar la persecución de las prácticas más dañinas para la economía, en especial los cárteles, contra los que seguirá trabajando con "especial ahínco", ha dicho.
En sus siete primeros meses de funcionamiento, el organismo ha adoptado 995 acuerdos y se han presentado para seguimiento o conocimiento del Consejo más de 483 asuntos.
En torno al 27% de los mismos corresponden al área de la competencia y su promoción, el 48% a energía, el 20% a telecomunicaciones y audiovisual y el 5% a transporte y sector postal.
Según el presidente de la CNMC, este ritmo de trabajo -tres reuniones a la semana y numerosas participaciones en foros internacionales y nacionales, además de una aparición casi diaria en los medios- es un buen reflejo del "funcionamiento normal" y "a pleno rendimiento" de la institución y del interés ciudadano que despierta.
Ha asegurado que esta institución de nueva creación -resulta de la fusión de los antiguos organismos supervisores- tiene entre sus fines de vigilancia "todos los sectores".
Según ha asegurado, la independencia "se demuestra con rigor y con el tiempo", y "no equivale a informar negativamente sobre cualquier propuesta del Gobierno", ni transformar la CNMC en un "búnker impenetrable", sino conseguir mercados más competitivos.