La tasa de inflación interanual de la zona euro se ha situado en marzo en el 0,5%, dos décimas por debajo del nivel registrado en febrero y su lectura más débil desde noviembre de 2009, según el dato adelantado publicado por Eurostat apenas tres días antes de que se reúna el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE).
La moderación de la tasa de inflación registrada en marzo se explica por la subida del 1% de los precios de los alimentos, el alcohol y el tabaco, frente al alza del 1,5% del mes anterior. Por su parte, el precio de la energía registró un descenso del 2,1%, tras haber bajado un 2,3% interanual en febrero.
De este modo, la inflación subyacente, que excluye la volatilidad de la energía y los alimentos frescos, experimentó en marzo una subida del 0,8%, frente al 1% de febrero. En el caso de excluir únicamente el precio de la energía, la inflación de la eurozona subió ocho décimas en marzo, tres menos que en febrero.
Por su parte, el precio de los servicios registró en marzo un alza del 1,1%, dos décimas por debajo de la subida del 1,3% de febrero, mientras que los bienes industriales no energéticos subieron un 0,3%, una décima menos que en febrero.
La persistente debilidad de los precios se extiende en marzo más allá de la periferia del euro, donde España registra una tasa de inflación armonizada del -0,2%, por primera vez en negativo desde octubre de 2009, puesto que el dato de Alemania registró en marzo un alza del 0,9%, la tasa más baja desde junio de 2010. De este modo, de confirmarse ambos datos, el diferencial de precios favorable a España respecto a la eurozona alcanzaría las siete décimas.