Restalia le da otro giro a su estrategia comercial con la firma de un acuerdo global con el Grupo Heineken. La propietaria de 100 Montaditos, La Sureña y TGB ha puesto fin a sus relaciones empresariales con Mahou y ha convertido a Cruzcampo, propiedad de Heineken, en su cerveza oficial.
Con esta nueva alianza "hemos dado un giro hacia la calidad y, sobre todo, hacia la internacionalización", ha explicado a Libre Mercado el director de Desarrollo Estratégico de Restalia, Oliver Henares.
Además de Cruzcampo, Heineken es propietaria de marcas tan emblemáticas como Amstel o Buckler. Ahora, "podemos ofrecer al cliente una experiencia más variada. Asociarnos a un grupo como Heineken nos va a permitir tocar los diferentes palos de las diferentes marcas", añade Henares.
El convenio de abastecimiento se ha firmado por un periodo de 5 años y se implantará en las tres enseñas de Restalia. El período de transición se llevará a cabo a partir de febrero y a finales del mes de marzo la nueva marca estará completamente instalada en todos sus restaurantes.
La compañía afirma en un comunicado de prensa que "este acuerdo permitirá a Cruzcampo una mayor penetración en países como Estados Unidos, México, Chile, Colombia, Italia y Portugal, en los que los restaurantes del holding empresarial son ya una realidad, así como en aquellos mercados clave dentro de su plan de expansión.
¿Se mantendrá el precio?
Fuentes de la compañía han asegurado a este periódico que la decisión se ha tomado de "mutuo acuerdo". La diferencias con Mahou en la visión estratégica de la expansión internacional han sido el motivo principal del fin de sus relaciones comerciales. "El Grupo Heineken coincide más con nuestra forma de ver las cosas", afirman las mismas fuentes.
Hay que decir que no es la primera vez que 100 Montaditos trabaja con Cruzcampo. Desde su nacimiento en el año 2000, cuando sólo era un pequeño restaurante en Islantilla (Huelva), la cadena de los bocadillos estuvo 9 años dispensando la cerveza sevillana. No fue hasta el año 2009 cuando Mahou se convirtió en su proveedor oficial.
Sin embargo, La Sureña ya nació con la cerveza Mahou bajo el brazo. De hecho, su modelo de negocio se ha basado, hasta ahora, en la venta de cinco botellines de esta marca por 3 euros. "En Sureña no hay mejor aliado que la cerveza del sur", comenta el director de Desarrollo Estratégico de Restalia sobre la llegada de Cruzcampo a sus locales.
Pero, ¿se mantendrá el precio de la cerveza en los establecimientos? Todo apunta a que en La Sureña lo subirán. Desde Restalia, ya adelantaron hace varias semanas que están estudiando encarecer esta bebida en La Sureña "por una política de consumo responsable lo que implica que quizás subamos el precio de la cerveza en La Sureña, como ya hemos hecho en 100 Montaditos, donde no está previsto volver a subirlo". La compañía subió hace unos meses el precio de la jarra de cerveza de 1 euro a 1,50.