Este miércoles se rompían las negociaciones entre la Autoridad del Canal y el consorcio constructor liderado por la española Sacyr y la italiana Impregilo. Los sobrecostes que demandan las empresas constructoras y la negativa de la Autoridad del Canal a cofinanciarlos se han convertido en un escollo casi infranqueable en un conflicto que dura ya más de un mes.
Ayer, el embajador de Panamá en España, Roberto Eduardo Arango, abría en los informativos de esRadio una puerta a continuar con las negociaciones. Este viernes, Sacyr ha confirmado que el Grupo Unidos por el Canal ha enviado una nueva propuesta al Canal con la esperanza de que se puedan iniciar de nuevo las negociaciones y que estas culminen en un acuerdo que les permita continuar con las obras de ampliación de la vía que ya están paralizadas.
Por su parte, tal y como publica el periódico panameño La Prensa, varios exministros de la junta directiva de la ACP cargan contra el consorcio liderado por la española. Los padres del proyecto fueron los encargados de tomar la decisión de ampliar el canal y, durante su mandato, se aprobaron, entre muchas otras cosas, el presupuesto de la obra, los términos y condiciones del respectivo contrato, los detalles conceptuales del proyecto, el tipo de contrato (diseño y construcción), así como los requisitos que debían cumplir las empresas interesadas en participar en el correspondiente proceso licitatorio.
Dada su condición y su conocimiento de los procedimientos, los exmiembros de la Autoridad del Canal tachan en un comunicado de "inadmisible la pretensión del consorcio GUPC de exigir un aumento multimillonario del precio del contrato de construcción de las nuevas esclusas" sin alegar sustancialmente las causas de esos sobrecostes y sin siquiera "seguir los pasos previstos en el contrato para formalizar su reclamación".
"Es igualmente inadmisible la amenaza del consorcio GUPC de suspender los trabajos a que se obligó contractualmente si la ACP no accede a su exigencia de que se aumente el precio del contrato", reza el comunicado. Pese a esta crítica directa a la actuación del consorcio liderado por Sacyr, los antiguos dirigentes de la gestora del Canal consideran "acertada" la decisión de la ACP de entablar conversaciones con el GUPC "con la mira de procurar una solución que evite la paralización de las obras a la par que proteja adecuadamente los intereses nacionales y que garantice la pronta culminación del proyecto".
Los antiguos miembros e ideólogos de uno de los proyectos civiles más importantes del mundo consideran que la Junta Directiva de la ACP, presidida por el ingeniero Roberto Roy, y su Administrador, el ingeniero Jorge Luis Quijano, "han manejado la crisis provocada por el consorcio GUPC con prudencia y patriotismo ejemplares", por lo que piden el reconocimiento de la ciudadanía.