Las instalaciones eólicas que comenzaron a funcionar antes de 2005 dejarán de percibir subvenciones "por haber superado la rentabilidad razonable" en virtud de los nuevos parámetros propuestos por el Gobierno para retribuir a las renovables.
Según la memoria de la propuesta de orden sobre el nuevo marco retributivo para el régimen especial (renovables, cogeneración y residuos) remitida a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), estas instalaciones pasarán a ingresar únicamente el precio por vender la energía que producen en el mercado sin ningún tipo de subvención adicional o prima como sucedía hasta ahora.
A cierre de 2004, había en España 8.840 megavatios (MW) eólicos que, en principio, se verían afectados por este cambio y que suponen un 38,5 % de toda la potencia instalada a finales de 2013 (22.959 MW, según datos de la Asociación Empresarial Eólica).
En un amplio documento, el Gobierno detalla cientos de parámetros y estándares en los que se basa el nuevo marco retributivo para el régimen especial, que tendrá aplicación desde julio de 2013 y que prevé ahorrar 1.750 millones este año.
Hasta ahora, sólo se sabía que estas instalaciones dejarían de cobrar primas, unos incentivos públicos por la energía que producen, para recibir una retribución que garantice una rentabilidad "razonable" en el entorno del 7,5 % (bono a diez años más 300 puntos básicos) a lo largo de toda su vida útil. A la espera de conocer estos parámetros, las renovables han seguido recibiendo una retribución provisional que ahora tendrán que ajustar.
En la memoria, Industria describe algunos ejemplos del impacto que tendrá el cambio de la retribución para las diferentes tecnologías, aunque el importe concreto de cada planta lo tendrán que calcular con los 1.631 parámetros detallados en el documento.
Así, una instalación eólica de 25 megavatios (MW) de potencia instalada con autorización en 2012 y una producción media anual de 2.100 horas pasará de recibir 2,125 millones de euros en primas, que se sumaban a lo recibido en el mercado, a una retribución total de 2,57 millones. Por su parte, una planta de 25 MW con permiso desde 2008 y 2.680 horas anuales de funcionamiento cobrará 2,52 millones de euros al año, menos de los 2,7 millones que recibía antes solo en primas.
En energía fotovoltaica, 1 MW puesto en marcha en 2008 y 1.648 horas de funcionamiento, pasará de recibir 686.032 euros anuales de primas, adicionales al mercado, a un total de 636.698 euros. Una central solar termoeléctrica de 50 MW con canales cilindro parabólicos, sin almacenamiento, puesta en marcha en 2012 y 2.040 horas de funcionamiento recibirá este año 23,98 millones en lugar de 25,45 millones más el mercado.
Estos cambios en el marco retributivo del régimen especial forman parte de la reforma eléctrica emprendida por el Gobierno en julio del año pasado para intentar acabar con el déficit de tarifa, desfase generado entre los ingresos y los costes del sistema y que supera los 26.000 millones de euros.
50.000 millones en renovables
En la memoria de la orden, se apunta que desde 1998 a 2013 los incentivos al régimen especial han ascendido a más de 50.000 millones de euros, incrementándose un 800 % desde 2005 a 2013, año en el que las primas sumaron unos 9.000 millones.
El objetivo del nuevo marco es, añade Industria, establecer regímenes retributivos que permitan "cubrir los costes necesarios para competir en el mercado en nivel de igualdad con el resto de tecnologías" y obtener una rentabilidad razonable que girará, antes de impuestos, en ese 7,5 %. Tras pasar por la CNMC, los documentos sobre este nuevo marco retributivo de las renovables deberán aprobarse por el Gobierno y publicarse en el Boletín Oficial del Estado (BOE).