El Banco Central Europeo (BCE) ha confirmado este lunes que aplicará los parámetros publicados por la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) en los próximos test de estrés, y que exigirá a 128 bancos comunitarios que su nivel de capital no caiga por debajo del 5,5% de sus activos cuando se les someta a un escenario de adverso.
El BCE defiende que tanto los test de estrés como los análisis de la calidad de los activos buscan aumentar la transparencia en los balances de los bancos más importantes y recuperar la confianza de los inversores antes de que la institución asuma las tareas de supervisión en noviembre de 2014. "Los preparativos para los test de estés están bien encaminados y confiamos en que, en estrecha coordinación con la EBA, el resultado sea transparente y creíble, impulsando al sector bancario europeo", destacó el vicepresidente del BCE.
En este sentido, también subrayó que los bancos han estado tomando medidas para fortalecer su capital y sus provisiones desde que se anunció el ejercicio. "Los bancos se están preparando desde el principio para el amplio análisis y están fortaleciendo sus balances, lo cual es una buena noticia", insistió.
Por su parte, la presidenta del Consejo de Supervisión, Danièle Nouy, explicó que en breve se finalizará la selección de carteras que será examinada. En su opinión, la calidad del ejercicio y cómo se lleva a cabo son elementos clave para garantizar que las carteras de préstamos de los grandes bancos están correctamente evaluados y son "factores críticos" para el resultado del ejercicio.
Análisis de la calidad de activos
El BCE está actualmente finalizando la metodología para los análisis de la calidad de los activos en un trabajo conjunto con los supervisores nacionales, que se publicará en el primer trimestre de 2014. Por su parte, la selección de las carteras finalizará a mediados de febrero.
Posteriormente, las autoridades nacionales competentes y otras entidades privadas especializadas revisarán los procesos, las políticas y las prácticas contables de los bancos, analizarán sus exposiciones crediticias y provisiones y evaluarán sus activos inmobiliarios y colaterales. En este sentido, la institución presidida por Mario Draghi explica que el uso de firmas privadas es necesario no sólo por la magnitud del ejercicio, sino también para "mejorar su independencia y su credibilidad".
En caso de las pruebas de estrés, el BCE confirma que se exigirá un mínimo de capital Tier 1 del 8% en el escenario base, mientras que para el adverso se aplicará un mínimo del 5,5%, así como que las pruebas incorporarán los resultados del análisis de la calidad de los activos. La EBA enviará a los bancos los detalles sobre los escenarios a finales del mes de abril.
Por su parte, la deuda soberana que se mantenga en carteras hasta vencimiento se tratará de la misma manera que otras exposiciones crediticias en esta misma cartera. En el caso de los valores disponibles para la venta o para negociación serán adaptados a valor de mercado, en línea con el escenario utilizado.
Una vez conocidos los resultados de los tests, los bancos que no hayan alcanzado el umbral mínimo de capital en el escenario base tendrán que adoptar medidas en el corto plazo, mientras que aquellos que no cumplan con los mínimos en el escenario adverso tendrán un mayor plazo para captar el capital necesario.