Si el contribuyente pensaba que Bankia sería el único gran agujero bancario que el dinero público tenía que hacer frente estaba equivocado. El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha reconocido este lunes que la Caja de Ahorros del Mediterráneo será la entidad que, posiblemente, necesite al final uno de los mayores rescates públicos, ya que "puede acabar teniendo un coste de 15.000 millones de euros".
La caja se vendió a Banco Sabadell, pero con un contrato de Esquema de Asunción de Activos por parte del Estado, es decir, durante varios años el sector público asumiría las pérdidas relacionadas por la adquisición de la entidad.
Además, De Guindos ha advertido de que no será posible saber cuánto cuesta el rescate bancario a los contribuyentes españoles hasta que finalice el proceso con la venta de las entidades financieras que aún están bajo el control del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y no descarta siquiera que pueda ser necesario destinar más fondos a este sector.
No obstante, se han inyectado en el sector financiero de forma directa "61.000 millones de euros aproximadamente, por el momento", reconociendo que "existe la posibilidad" de que esa cifra aumente.
Diez años atrapados con la CAM
Tras 137 años de historia y después de los últimos de una gestión nefasta por parte de sus directivos, la Caja de Ahorros del Mediterráneo entraba a mediados de 2012 en proceso de liquidación y disolución.
Banco Sabadell cerró en junio de 2012 la compra del 100% de CAM por el precio simbólico de un euro. Al mismo tiempo, el FROB inyectaba algo más de 5.200 millones de dinero público para que Sabadell aceptase quedarse con la entidad.
Por si esto fuera poco, el contrato llevaba incluidas ayudas públicas durante los próximos años por medio del Esquema de Protección de Activos (EPA), que cubriría el 80% de las pérdidas que pueda producir la cartera crediticia de 24.600 millones de CAM en los próximos diez años.
Éste es el monto nuevo al que se ha referido De Guindos este lunes durante su comparecencia en el Congreso y que podría elevar el rescate de la Caja de Ahorros del Mediterráneo a más de 15.000 millones de euros de dinero público.