La crisis económica ha puesto de manifiesto la falta de rigor y mala praxis ejercida desde las diferentes administraciones públicas a la hora de recurrir a las arcas del Estado. Tanto a nivel nacional, autonómico como local, las cuentas públicas registran alto grado deficitario, producido, en parte, por obras públicas faraónicas carentes de un sólido proyecto previo de viabilidad. Es el caso de los llamados aeropuertos fantasma.
Recientemente, dos de estos aeropuertos han sido noticia debido a la situación ruinosa en la que están inmersos. El primero, el de Ciudad Real, costó más de 1.000 millones de euros en 2008 y hoy su puja está en los 100 millones; una décima parte. El segundo, el Aeropuerto Internacional de la Región de Murcia (AIRM), situado en Corvera -Murcia-, se encuentra paralizado desde 2012 por las dudas sobre su viabilidad.
El Gobierno ya ha anunciado que acudirá al rescate, poniendo a disposición de la Comunidad Autónoma de Murcia hasta 40,61 millones de euros procedentes del Instituto de Crédito Oficial. El dinero servirá para liberarla de la carga del aval de 200 millones de euros ya vencido y que la comunidad por sí sola no puede afrontar. Y es que la construcción de este aeropuerto gestionado por Aeromur lleva casi dos años paralizada por falta de fondos.
Por todo ello, más que nunca, supone un ejercicio positivo hacer un repaso pormenorizado de la red española de aeropuertos para determinar su situación y viabilidad. En total, España cuenta con un total de 51 aeropuertos, 47 de ellos dependientes de Aena. Y es que, a pesar de que Aena es el mayor operador aeroportuario del mundo por número de pasajeros, con 194 millones de personas, las cifras en España ponen en entredicho la eficiencia de nuestra red. Según datos aportados por el propio organismo, sólo en 2012 la red de aeropuertos españoles tuvo unas pérdidas de casi 71 millones, elevando su deuda total a más de 12.000 millones de euros.
La cuenta de resultados de Aena pone de manifiesto la necesidad de un cambio en el modo de gestión. De los 47 aeropuertos, únicamente 18 fueron rentables antes de gastos de amortización, intereses e impuestos, y de esos sólo 8 tuvieron beneficios después de impuestos: Palma de Mallorca (73,88 millones de euros), Barcelona- El Prat (73,61 millones de euros), Gran Canaria (28,12 millones), Tenerife Sur (27,91 millones), Ibiza (7,05 millones), Lanzarote (5,90 millones), Sevilla (4.03 millones) y Bilbao (280.000 euros).
Media de pasajeros diaria
Sorprende la poca afluencia de pasajeros en la mayoría los aeropuertos españoles. Los datos publicados por Aena muestran cómo 14 aeropuertos ni siquiera llegan a 2.000 pasajeros por día de media. Los casos más destacables son:
Los aeropuertos más ruinosos
Según datos elaborados por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), 27 de los 49 aeropuertos de Aena registraron pérdidas de más de 10 euros por pasajero durante el 2012. Y de esos 27 aeropuertos, 14 de ellos obtuvieron pérdidas superiores a los 100 euros por pasajero. Entre los aeropuertos más ruinosos del 2012 están:
Distancia entre aeropuertos
Lejos de poder justificar el alto déficit generado por necesidades básicas de comunicación, el informe de 2011 realizado por Fedea muestra cómo 24 de los 47 aeropuertos tienen otro aeropuerto cercano, a no más de 130 kilómetros. Véase el aeropuerto de Vitoria, que se encuentra rodeado por los aeropuertos de San Sebastián, Bilbao, Pamplona, Burgos y Logroño. Destaca también la corta distancia que dista entre el aeropuerto de Santiago de Compostela y el de La Coruña, de apenas 60 kilómetros.
Aeropuertos ajenos de Aena
- Aeropuerto de Ciudad Real
Inaugurado a finales de 2008, costó construirlo 1.100 millones de euros. Un 63% del presupuesto fue sufragado con capital privado, los otros 400 millones de euros fueron afrontados por Caja Castilla-La Mancha, intervenida más tarde por el Banco de España con un agujero de entre 3.000 y 4.000 millones de euros. En abril de 2012, el aeropuerto cerró sus puertas ante su imposible viabilidad.
A día de hoy, está en concurso de acreedores. El pasado 9 de diciembre la administración concursal abrió el plazo para poder recibir ofertas, estableciendo la puja mínima en 100 millones de euros, un 10% de lo que costó. En el caso de no encontrar ningún comprador, se rebajará la puja inicial a 80 millones.
- Aeropuerto de Lérida-Alguaire
Apuesta directa de la Generalidad de Cataluña. El aeropuerto de Lérida es gestionado por Aeropuertos de Cataluña, ente público creado en 2009. El entonces presidente de la comunidad, José Montilla, fletó un Airbus de la aerolínea Vueling para volar desde el aeropuerto de El Prat hasta el de Lérida; un recorrido de apenas 170 kilómetros por carretera. Las únicas aerolíneas que operaron fueron Vueling, con dos rutas Palma de Mallorca y París.
Y más tarde, Ryanair con vuelos a Frankfurt y a Milán. Pese a la escasa afluencia de público, las aerolíneas recibían subvenciones registradas como "promoción turística" para así poder ofertar el servicio. Durante el primer año tuvo 57.000 pasajeros, en 2011 bajó a 24.000 y el pasado año registró 33.000 clientes. Esto significa que de media, el aeropuerto ha tenido apenas una afluencia de 105 personas por día.
- Aeropuerto de Castellón
El aeropuerto fantasma, inaugurado en marzo de 2011 y gestionado por la empresa pública Aerocas, aún no ha recogido ninguna operación de vuelo. Y es que tras 20 años, el aeropuerto, que estaba destinado a ser punto de referencia del turismo del levante, aún no ha llegado a buen término.
Alberto Fabra ha vuelto a manifestar su intención de abrir finalmente el aeropuerto para 2014. El aeropuerto ha costado 136,8 millones de euros y para este año estaba registrado en los presupuestos autonómicos una partida de 17 millones de euros para su mantenimiento. Y es que sólo en la factura de la luz, el aeropuerto de Castellón gasta más de 90.000 euros anuales.
- Aeropuerto Internacional de la Región de Murcia (AIRM)
No estará en funcionamiento, como mínimo, hasta 2014. El proyecto, que soporta una deuda de 200 millones de euros, es liderado por Sacyr, que controla el 60,65%. El pasado junio de 2012 el consorcio de empresas solicitó una revisión del contrato a la comunidad murciana liderada por Ramón Luis Valcárcel, debido a la caída de la demanda y el aumento del coste previsto.
Finalmente, el Ejecutivo central ha decidido rescatar el aeropuerto, abonando 40,61 millones de euros para liberar la carga asumida por el Gobierno murciano, tras avalar 200 millones de deuda. Además, con todo ello, Aena invirtió recientemente 70 millones de euros en la nueva terminal del aeropuerto de San Javier, situado a 39 kilómetros del AIRM, con lo que la puesta en marcha por parte del Gobierno del aeropuerto Internacional de Murcia exigiría, probablemente, una indemnización mínima de la cuantía recién gastada.