CaixaBank ha ampliado su presencia en Marruecos con la apertura de una oficina en Tánger, de forma que se convierte en el único banco español operativo en esta región del norte de Marruecos, donde operan más de 250 empresas españolas, ha señalado en un comunicado este miércoles.
La entidad abrió hace cuatro años una oficina en Casablanca, la capital económica del país, y el consejero delegado de CaixaBank, Joan Maria Nin, ha contextualizado la nueva apertura en la vocación de acompañar al cliente allá donde lo necesite y, especialmente, en aquellos países "con alto potencial de crecimiento, como es el caso de Marruecos".
La oficina de Tánger, dirigida por Mohamed Mesbah, acompañará y ayudará a todos sus clientes tanto en la fase de implantación como en la fase de desarrollo y consolidación de sus empresas en territorio marroquí.
La de Casablanca ya cuenta con un 30% de la cuota de mercado del total de empresas españolas en el país y con una cuota de mercado del 50% en emisión de garantías para empresas españolas en Marruecos.
Actualmente, hay más de 900 empresas españolas instaladas en diferentes sectores productivos de la economía marroquí, un 25% de ellas en la región de Tánger, y más de 20.000 pymes exportan directamente a Marruecos.
Los sectores prioritarios para la empresa española son las energías renovables, las infraestructuras, la agroindustria y alimentación, el tratamiento de aguas, la automoción y el equipamiento industrial.
España es el primer cliente y el primer proveedor de Marruecos: las exportaciones españolas al país magrebí crecieron un 28% en 2012, cifra que triplica el crecimiento europeo, y Marruecos se ha convertido en el segundo destino principal de exportaciones españolas fuera de la UE, con 18.839 empresas que exportaron a este país a lo largo de 2012.
Obra social
CaixaBank también contribuye a la lucha contra la exclusión social en Marruecos a través de diversas acciones financiadas por la Obra Social La Caixa, como el Programa Incorpora -para fomentar el empleo, con 2.500 beneficiarios desde 2009 en Tánger y Casablanca- y el proyecto Mirall-Mraya de atención a personas en situación de vulnerabilidad.
Este segundo proyecto ha contribuido desde el año 2011 al desarrollo y profesionalización de 16 pequeñas asociaciones de Tánger que atendieron a más de 13.000 personas como madres solteras, niños en riesgo de fracaso escolar, ex consumidores de drogas y todo tipo de colectivos con dificultades para acceder al empleo, ya sea por falta de formación o por estar afectados por una deficiencia física o mental.