Valencia ha creado un impuesto sobre los depósitos bancarios que cargará a las entidades financieras con el que el Gobierno de la Generalidad pretende recaudar 230 millones de euros. Extremadura, Andalucía, Canarias, Asturias y Cataluña ya han implantado este gravamen pese a que se encuentra en un limbo legal.
En el capítulo de impuestos directos se incluye una partida de 230 millones de euros que vendrán del "Impuesto sobre los depósitos en las entidades de crédito", una tasa que no está incluida en la ley de Acompañamiento y que la Administración valenciana está estudiando cómo implantar en la legislación regional, según recoge Expansión.
El proyecto de Ley de Presupuestos para 2014 se presentó este miércoles en las Cortes Valencianas. El consejero de Hacienda de la comunidad, Juan Carlos Moragues ha destacado que este impuesto va dirigido "a las entidades financieras, no a los clientes" y ha advertido que actuarán en caso de detectar que repercuten a los impositores de esa nueva carga. Según ha indicado, dedicarán lo recaudado entre las entidades financieras a "atender a las personas".