Indra obtuvo un beneficio neto de 66,6 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que representa un descenso del 29% con respecto al mismo periodo al año anterior, según ha informado este jueves la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La firma presidida por Javier Monzón ha precisado que, sin tener en cuenta gastos extraordinarios, el beneficio neto recurrente fue de 87,4 millones de euros, lo que supone un descenso del 24%.
En los nueve primeros meses del año, las ventas del grupo tecnológico alcanzaron los 2.122,8 millones de euros, prácticamente sin cambios respecto a los 2.120,8 millones de euros del mismo periodo del año anterior.
La firma ha puntualizado que las ventas hubieran crecido cerca de un 3% sin el impacto de la apreciación del euro durante este ejercicio en las áreas geográficas donde la compañía opera, que además en el tercer trimestre del año se aceleró.
Por áreas geográficas, las ventas en España, que representan un 40% del total, cayeron un 11%. Del mismo modo descendieron un 9% los ingresos en el área de Asia, Oriente Medio y África (AMEA), que representa un 12% del total.
Por el contrario, las ventas en Latinoamérica, que suponen un 29% del conjunto, mejoraron un 15% y los ingresos de Europa y Norteamérica, con un peso del 20%, mejoraron un 13%.
La contratación cae un 10%
En cuanto a la contratación, la cifra se situó en los 2.176,8 millones de euros, lo que supone un 10% menos, debido principalmente a la disminución en el área de Soluciones por el contrato obtenido en el primer trimestre del año anterior para el tren de alta velocidad de Arabia Saudita.
El resultado neto de explotación (Ebit) alcanzó los 139,7 millones de euros, lo que supone un 8% menos que en el mismo periodo de 2012, situando el margen Ebit en el 6,6%, frente al 7,2% de los nueve primeros meses del ejercicio anterior.
Respecto al empleo, al cierre de septiembre, la plantilla total se situaba en 38.685 profesionales, lo que supone el mismo nivel de diciembre 2012, con un comportamiento mixto por geografías. En concreto, en España el empleo cayó un 4% respecto al cierre de 2012, hasta los 20.637 profesionales.
La deuda neta de la compañía en los nueve primeros meses del año ascendió a 707 millones de euros, lo que supone un 7% más, tras pagar el dividendo correspondiente al ejercicio 2012 por un importe de 56 millones de euros. La compañía ha indicado que espera que el nivel de deuda neta se reduzca al final del ejercicio.
Dividendo igual o superior en 2014
Indra ha señalado que las perspectivas actuales de mejora en la evolución del negocio y del flujo de caja para los próximos ejercicios permiten prever que el dividendo a abonar en 2014, con cargo a los resultados de 2013, será "igual o superior" al pagado en este año.
La empresa ha indicado que la evolución de su negocio en los nueve primeros meses del año ha sido "positiva", "en línea con lo previsto", lo que permite el cumplimiento de todos los objetivos para 2013.