El sindicato UGT-Madrid ha despedido a 35 trabajadores este mes. Lo que llama la atención de esta decisión no es que UGT mande a gente a la calle, sino que utilice la reforma laboral del PP para amedrentar a sus despedidos. Según la carta de despido enviada por la central a los afectados a la que ha tenido acceso ABC, sólo si hay conformidad con la causas del ERE, y los 35 despedidos no acuden a los tribunales, cobrarán más de 20 días por año trabajado.
"En el supuesto de su adhesión al acuerdo alcanzado con los representantes de los trabajadores de forma voluntaria y personal, tendrá derecho a una mejora de indemnización de 15 días adicionales que se le entregará en un segundo cheque de forma simultánea, si bien su aceptación supone su conformidad con el expediente y el reconocimiento de dichas causas", dice el texto. La actual reforma laboral estipula indemnizaciones de 20 días por año trabajado y 12 mensualidades cuando se produce un despido por causas económicas que es el que ha justificado el sindicato.
A principios de este mes, la central sindical presumía de que había ofrecido a sus trabajadores afectados por el ERE 35 días por año trabajado hasta 15 mensualidades y había reducido los despidos de 44 a 32. Todo esto lo hacía con la intención de "alejarse de las condiciones fijadas por la reciente reforma laboral y para dar a los trabajadores afectados lo máximo posible dentro de la complicada situación económica que están sufriendo". Ahora, resulta se alejarán de la reforma laboral si sus empleados acatan el despido sin protestar, de lo contrario no.
"La falta de ética y de coherencia en que incurre este sindicato es de una magnitud considerable", aseguran algunos de los despedidos al diario. Preguntado por Libre Mercado, UGT-Madrid no ha querido hacer declaraciones sobre el asunto.