El Tesoro Público ha aprovechado la mejora de la prima de riesgo para colocar 3.080 millones de euros en bonos y obligaciones, con lo que ha superado ligeramente el máximo previsto pese a haber ofrecido a los inversores tipos más bajos en la referencia a más corto plazo.
En concreto, el Tesoro ha vendido 1.015,90 millones de los 2.778,30 millones solicitados por el mercado en obligaciones con cupón del 5,15% y vencimiento a 31 de octubre de 2028. Así, la demanda ha superado en 2,7 veces lo colocado.
El tipo medio de este tipo de papel se ha situado en el 4,809% y el marginal en el 4,829%. Esta referencia no es comparable a otras a largo plazo emitidas a lo largo del año, aunque el Tesoro la emitió en julio en forma de subasta sindicada y con interés del 5,194%.
Por otro lado, ha colocado 2.063,70 millones de los 4.649,89 millones pedidos por los inversores en bonos con cupón del 3,30% y vida hasta el 30 de julio de 2016. De esta forma, las peticiones han superado en 2,3 veces lo vendido, aunque se han moderado respecto a la anterior subasta (3,3 veces).
También se han moderado las rentabilidades, ya que, en esta ocasión, el Tesoro ha ofrecido a los inversores un interés medio del 2,225% frente al 2,636% de principios de agosto y un interés marginal del 2,244% frente al 2,656% anterior.
En cualquier caso, el organismo ha conseguido aprovechar la mejora de los mercados para cerrar la emisión, después de que la prima bajara de los 240 puntos en los primeros minutos de la sesión y se situara así en mínimos de hace dos años. Poco después de conocer el resultado, subía al entorno de los 246 puntos.
A lo largo de la semana, el Tesoro ha conseguido captar más de 7.600 millones, tras vender el pasado martes 4.560 en letras a 6 y 12 meses. En lo que queda mes, el organismo se volverá a someter al escrutinio de los mercados en otra ocasión más, con una subasta de letras a tres y nueve meses el próximo 24 de septiembre.