Los mercados españoles continúan en positivo. El Ibex 35 ha mantenido su vigor alcista y se ha anotado su tercera subida consecutiva (+0,55%), lo que le ha permitido ampliar máximos anuales y marcar un nivel desconocido desde octubre de 2011. El selectivo mira ahora a su próximo reto, la cota de los 9.000 puntos, cifra que no supera desde el principios de febrero del año pasado. El Ibex ha cerrado este jueves en los 8.924 puntos.
En las primeras horas de sesión, el selectivo ha dudado ante el dato de producción industrial de la UE, si bien el paro semanal de Estados Unidos, en mínimos de abril de 2006, ha insuflado el ánimo necesario a los inversores para lanzarse a perforar máximos anuales e incluso a acercarse por momentos a la barrera psicológica de los 9.000 puntos.
Los valores
Popular ha protagonizado la mayor subida, al disparase un 5,89% ante la inminencia de un acuerdo sobre los activos fiscales diferidos. También han despuntado DIA (+1,80%) y OHL (+1,75%). Arcelormittal se ha anotado la pérdida más pronunciada de la sesión, al caer un 1,73%.
Con incrementos inferiores al 1% se han quedado IAG (+0,86%), Telefónica (+0,72%), Mediaset (+0,61%), BBVA (+0,57%), Santander (+0,52%), Inditex (+0,51%), Red Eléctrica (+0,5%), Ferrovial (+0,42%) y Grifols (+0,42%).
Los incrementos más bajos se los han anotado Viscofan (+0,35%), Endesa (+0,35%), Bolsas y Mercados (+0,27%), Mapfre (+0,25%), Acciona (+0,21%), Iberdrola (+0,14%), Repsol (+0,11%), Gas Natural (+1%).
En el lado opuesto, Arcelormittal se ha anotado la pérdida más pronunciada de la sesión, al caer un 1,73%, seguida de Técnicas Reunidas (-0,63%), Caixabank (-0,51%), Ebro Foods (-0,45%), Enagas (-0,35%), FCC (-0,21%) y Banco Sabadell (-0,10%). Abertis (-0,07%), Indra (-0,04%), Acerinox (-0,04%) y Bankinter (+0,05%) cerraron prácticamente planos.
El resto de plazas europeas Francfort caía un 0,02% al cierre del parqué madrileño, mientras que París se debaja un 0,3% y Londres se mantenía casi plano (0,01%).
En el mercado de deuda, la prima de riesgo española se mantenía estable y permanecía por debajo de la italiana. El diferencial del bono español se establecía en los 252 puntos básicos, frente a los 257 puntos que marcaba el del país transalpino.