El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha impuesto una fianza civil de 1.200 millones de euros a diez directivos de Pescanova y seis sociedades, entre ellos su expresidente, Manuel Fernández de Sousa, quien tendrá que pagar una fianza de 178,8 millones de euros. Por su parte, los consejeros Alfonso Paz Andrade y José Antonio Pérez Nievas tendrán que entregar 125 y 54,7 millones de euros, respectivamente.
El magistrado ha impuesto también fianzas de 69,4 millones a los directivos Pablo Javier Fernández Andrade, F. F. S., Robert Albert Williams, Jesús García García, Joaquín Viña Tamargo, Antonio Taboas y Alfredo López.
Por su parte, la sociedad Pescanova SA tendrá que entregar en el Juzgado una suma de 54,8 millones mientras que Inverpesca SA Sociedad Gallega de Importación de Carbones SA, Sociedad Anónima de Desarrollo y Control, ISS Holding Limited y Inverlema S.L. deberán depositar 69,4 millones de euros cada una.
Esta suma servirá para garantizar las eventuales responsabilidades pecuniarias derivadas de la causa, en la que se investiga el falseamiento de cuentas de la compañía que condujo a varios inversores a la compra de acciones.
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 aseguraba en un auto fechado el pasado 23 de mayo que los administradores de Pescanova "valiéndose de una información reflejada en las cuentas anuales (...) que no se ajustaba a la realidad" proporcionaron públicamente una imagen irreal de la situación económica de la empresa, lo que condujo a los querellantes a adquirir paquetes de acciones.
De hecho, el auto precisaba que entre los meses de agosto de 2012 y enero de 2013 varios analistas financieros recomendaron la inversión en estos valores en base a estos datos falsos. Ruz agregaba que las cuentas anuales de los ejercicios 2008, 2010 y 2011, los folletos informativos y otros informes financieros "no reflejaban la imagen fiel" de la compañía. Esto se deduce del hecho de que sólo unos meses después su presidente comunicara a la CNMV su decisión de no formular sus cuentas de 2012 y manifestara sus dudas sobre la propia continuidad de la empresa.
El pasado mes de marzo quedó suspendida la cotización de la acción y en abril, Pescanova solicitó la declaración de concurso de acreedores.
Vendió acciones antes de la quiebra
En concreto, según los datos que constan en la causa, Fernández de Sousa vendió, a través de la Sociedad Anónima de Desarrollo y Control (Sodesco), 1,6 millones de acciones a un precio medio de 16,26 euros entre enero y febrero de 2013, mes en el que la empresa de declaró en concurso de acreedores. El expresidente obtuvo de este modo 27,4 millones de euros y evitó una pérdida de 15,6.
Por su parte los consejeros Paz Andrade y Pérez Nievas vendieron en los mismos meses 344.972 y 110.000 títulos lo que les supuso sendos ingresos de 5,8 y 1,8 millones de euros respectivamente.
En un auto fechado el pasado 16 de agosto pero notificado este lunes, el juez concede un plazo de 10 días a los directivos y sociedad afectados para que hagan efectiva la fianza y advierte de que en caso contrario se procederá al embargo de sus bienes. Los imputados prestarán declaración ante el magistrado los próximos 16 y 17 de octubre.