Codere está viviendo su peor momento. La multinacional del juego registró pérdidas de 74,7 millones de euros en el primer semestre del año, frente a los números rojos de 42 millones de euros del mismo periodo de 2012, según ha informado este viernes la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La compañía ha explicado que su resultado semestral se ha visto afectado por el cargo de 24,3 millones de euros registrado por el deterioro de activos en México, aunque ello no representa desembolso en efectivo.
Codere ha retrasado 30 días el pago de los intereses de la deuda en dólares que debería abonar el 15 de agosto, utilizando un periodo de gracia, tras el cual entraría en situación de impago, según informa su auditora, PriceWaterhouse, en un documento al que ha tenido acceso el diario Cinco Dias.
La auditora explica que si Codere no paga los intereses en el plazo establecido, se le cerraría la línea de crédito de 98 millones firmada en junio que impediría a la compañía continuar con su actividad.
La empresa informa de que está buscando más financiación a través de proveedores de máquinas recreativas, vendiendo activos o iniciando una renegociación de la deuda "que podría potencialmente dar lugar a cambios contractuales que modifiquen la carga financiera de la compañía", lo que significaría, una quita parcial.
Los resultados del primer semestre del año tampoco han ayudado a aumentar las esperanzas en el futuro de la empresa del juego. Su resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 112,5 millones de euros entre enero y junio, con un descenso del 27,7%, afectado por los descensos en Argentina, Italia y Uruguay y, en menor medida, en México, frente al crecimiento registrado en España.
Por su parte, la facturación de la compañía alcanzó los 787,6 millones de euros, un 3,9% menos que en el primer semestre de 2012, por los menores ingresos en Argentina y México, parcialmente compensados por el crecimiento de Uruguay e Italia.
Las inversiones de Codere alcanzaron los 49,1 millones de euros en el primer semestre, de los cuales 27 millones corresponden a mantenimiento y 22,1 millones de euros a crecimiento.
La compañía subrayó que el crecimiento del parque de máquinas se concentró en Uruguay y Argentina, aunque el número total de terminales de juego se redujo un 3,5%, hasta 54.222, debido a la racionalización del parque en España y al cierre temporal de salas en México.