Felipe Calderón hizo una defensa a ultranza de la libertad económica y política en la inauguración del curso internacional del Campus FAES, que se desarrolla estos días en Guadarrama. En compañía de José María Aznar, el expresidente de México instó a buscar "alternativas" en Europa y en el mundo "para construir una salida económica" que ha de estar "sobre la base de la libertad".
Sobre el primero de los palos, defendió el comercio libre "como un instrumento que genera bienestar y ganancias". Destacó que los "grandes errores" de los gobiernos, por ejemplo en América Latina, "está en ignorar este principio elemental del comercio que es el de generar más bienestar y ganancias a mayor apertura y nivel comercial".
Seguridad jurídica para el libre comercio, emplazó Calderón. "Por eso es tan importante ser un país de leyes, y eso es clave para el crecimiento en América Latina". E insistió: "La clave de una economía global está en no ser dependiente de una fuente de ingresos sino en ser un eslabón eficiente en la economía global, porque la realidad y el mundo son globales".
En relación a la libertad política -segundo de los puntos de su intervención-, el líder americano enfatizó que "no todo es economía", y de ahí la necesidad de ser "un referente obligado de desarrollo humano integral y sustentado". A su juicio, "es necesario la democracia para conseguir la justicia en la libertad humana".
Aznar fue el encargado previamente de presentarle: "México es un aliado esencial que debemos tener presente" ya que, argumentó, "cada vez que España y México han tomado iniciativas conjuntamente las cosas han funcionado razonablemente bien". En este sentido, el líder de FAES -al que une a Calderón una buena amistad- recordó los logros de su mandato, y en especial su lucha "contra la criminalidad organizada y por instituciones cada vez más sólidas".