La economía española seguirá en una importante recesión todo lo que queda del año, lo que llevará a una caída del PIB del 1,4% en 2013. En el próximo ejercicio, las cifras serán algo mejores, con una subida del 0,9%. Pero, en cualquier caso, no será suficiente para evitar que la tasa de paro se mantenga en niveles dramáticos, del 27,1% a final de este año y el 26,4% para cuando termine 2014. Éstas son las principales conclusiones del informe BBVA Research del 2º Trimestre, que el servicio de estudios de la entidad ha presentado este jueves en Madrid.
Desde que se han dado a conocer los datos, han comenzado las comparaciones con las previsiones del Gobierno, sobre si este o aquel indicador era unas décimas superior o inferior a lo anunciado por Luis de Guindos. Sin embargo, más allá de esta cuestión, el informe es un detallado estudio de la situación actual de la economía española que incluye propuestas sobre cómo debería actuar el Ejecutivo en los próximos meses.
El resumen podría ser: centrar el ajuste en el lado del gasto, rehacer el sistema fiscal español y emprender con energía las grandes reformas diferidas en los últimos meses. Sólo en el editorial, de apenas un par de páginas, se puede encontrar un completo programa de gobierno, listo para comenzar a aplicarse cuanto antes:
- “Ventana de oportunidad”: los autores creen que el margen otorgado por la Unión Europea a España para el cumplimiento de los objetivos de déficit y la “reducción en las tensiones de los mercados de capital” ofrecen una “ventana de oportunidad” que no debería desaprovecharse. Por un lado, Bruselas ya admite que no habrá que llegar al 3% de déficit hasta 2016. Por ejemplo, eso se traduce en un margen extra de 18.000 millones de euros para este año, más que suficiente para aliviar la carga impositiva que recae sobre familias y empresas. Por ejemplo, según los cálculos de Hacienda, las subidas aprobadas por Mariano Rajoy han supuesto una recaudación extra de 11.237 millones en 2012.
- Menos gasto y menos impuestos: este tiempo extra podría aprovecharse para equilibrar “la composición del ajuste”, a través de un incremento en “la eficiencia del gasto público y del sistema impositivo”. Es decir, que los autores insinúan al Gobierno que si tiene que equilibrar las cuentas públicas, lo haga por la vía de los gastos y deje a los contribuyentes tranquilos.
- La reforma fiscal: en este sentido, los autores aconsejan que se avance en el camino de una reforma tributaria profunda, que incluyera un “marco fiscal con menores tipos marginales, menos deducciones y que incrementara la presión sobre el consumo y la disminuyera sobre el empleo”. Ésta es una receta parecida a la que los expertos le han venido reclamando a Mariano Rajoy de forma insistente en las últimas semanas. Pero, por ahora, el Gobierno se ha quedado sólo con la parte de quitar deducciones sin tocar los tipos marginales; lo que, en la práctica, se traduce en subir los impuestos.
- Reformas pendientes: BBVA cree que aunque el Plan Nacional de Reformas incluye un “diagnóstico acertado”, introduce “pocas novedades” respecto a los compromisos adquiridos a mediados de 2012. Por eso, reclama no sólo que “se implementen” cuanto antes, sino que se presente a la sociedad “una hoja de ruta clara que permitan explicar los cambios que necesita España”. Entre estas reformas, los autores creen ineludibles las “encaminadas a reducir el gasto estructural, que van con retraso (Proyecto de Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local) o de las que no se conocen los detalles(Reforma de las Administraciones Públicas).
- Mercado laboral: de hecho, ni siquiera algunas de las reformas de las que más presume el Gobierno, como la laboral, se escapan a las recomendaciones de BBVA Research. En lo que hace referencia al mercado de trabajo piden, en línea con Bruselas o la OCDE, el BBVA reclama limitar “la segmentación del mercado de trabajo, fomentar el empleo a tiempo parcial y mejorar la efectividad de las políticas activas y pasivas del mercado de trabajo”. Es decir, reducir el número de contratos, aumentar la flexibilidad para ajustar los tiempos de trabajo y cambiar el subsidio del paro y los incentivos a los desempleados.
- Autoridad fiscal ¿independiente?: por último, el informe se detiene en la recientemente creada Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIRF) que será nombrada por el Gobierno y estará dentro de la estructura del Ministerio de Hacienda. En este sentido, BBVA pide que “su independencia sea indiscutible”, algo para lo que ayudaría que estuviera adscrita al “poder legislativo” y que incluyera un consejo asesor con “expertos de reconocido prestigio”.