La Comisión Europea ha avisado este miércoles de que España sufre desequilibrios económicos "excesivos" que ponen en riesgo la estabilidad económica y financiera y ha tachado de "incompleta" la agenda de reformas aprobada hasta ahora por el Gobierno de Mariano Rajoy para corregir estos problemas.
El Ejecutivo comunitario cree que la recesión podría prolongarse hasta avanzado 2014 debido al riesgo de "retroalimentación negativa" entre la contracción económica, el desendeudamiento y la volatilidad de los mercados financieros. Además, el paro seguirá subiendo hasta el 27% este año, y el aumento del desempleo de larga duración "podría reducir el potencial de crecimiento de la economía".
"Aunque el ajuste de los desequilibrios ha avanzado en 2012, los riesgos para la estabilidad macroeconómica y financiera todavía no se han disipado", apunta la Comisión en un informe sobre los riesgos económicos en la UE. El estudio se basa en datos de 2011, pero el análisis se ha realizado en las últimas semanas.
De los 13 países cuyos desequilibrios económicos han sido examinados, España y Eslovenia son los únicos donde se ha detectado que son "excesivos". La Comisión ha pedido a ambos países que incluyan "una respuesta política global y detallada para afrontar los desequilibrios" en sus planes de estabilidad y reformas que deben enviar a Bruselas antes de que acabe el mes.
El Ejecutivo comunitario examinará las medidas correctivas que presenten España y Eslovenia y el 29 de mayo decidirá si es necesario avanzar en el procedimiento sancionador por desequilibrios excesivos. Este procedimiento prevé sanciones de hasta el 0,1% del PIB (1.000 millones de euros en el caso de España), pero éstas no se aplican de forma automática sino sólo al final de un largo trámite, que permite numerosas prórrogas, si el Gobierno desoye las recomendaciones de la UE.
Reforma laboral y Seguridad Social
En particular, Bruselas pide al Gobierno de Mariano Rajoy que revise la reforma laboral aprobada el año pasado para garantizar que cumpla los objetivos de "más eficacia y reducción de la dualidad del mercado laboral, mayor flexibilidad interna, un proceso de negociación salarial que garantice un mejor alineamiento de los salarios con las condiciones económicas, más empleabilidad de los jóvenes y mayor uso de contratos fijos".
También reclama "reforzar las políticas activas de empleo, los servicios públicos de empleo y la formación profesional". "La capacidad de ajuste de la economía, la absorción del gran número de parados y la competitividad dependen decisivamente de un mercado laboral que funcione bien", avisa el Ejecutivo comunitario.
Además, España deberá seguir haciendo "continuos esfuerzos" en los próximos años para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de las finanzas públicas. "La credibilidad del ajuste fiscal se vería reforzada basando la consolidación en medidas estructurales, también para garantizar la sostenibilidad del sistema de Seguridad Social", señala el informe.
La Comisión solicita al Gobierno que "complete rápidamente" la reestructuración y recapitalización de los bancos que se han beneficiado del rescate de la UE y las reformas exigidas en el sector financiero, y que impulse otras fuentes de financiación, en particular para las pymes. También aboga por medidas para impulsar el mercado del alquiler.
Finalmente, el Ejecutivo comunitario espera del Gobierno más iniciativas para liberalizar los mercados de productos y servicios, incluyendo las industrias de red, y una revisión del sistema impositivo para que sea más compatible con el crecimiento.
"La agenda de reformas (del Gobierno) sigue siendo incompleta, e incluso las reformas que ya se han aprobado todavía no han tenido pleno efecto debido a retrasos en su aplicación", resalta el informe. "Como resultado, la capacidad de ajuste de la economía sigue siendo insatisfactoria, ya que la mayor parte del ajuste recae sobre el empleo", agrega.
La vivienda seguirá cayendo
La reducción de la renta disponible, el aumento del paro y la caída de los precios de la vivienda (un 31% en términos nominales desde su tope) están reduciendo la capacidad de los hogares para reducir sus deudas. "El ajuste en el sector de la vivienda no se ha completado, y son probables nuevas caídas tanto en los precios como en la inversión", apunta el informe.
La deuda privada tan sólo se ha reducido 15 puntos desde su máximo del 227% del PIB en 2010. La disminución ha sido más rápida en las empresas no financieras que en el ámbito doméstico, aunque Bruselas alerta de que "los créditos morosos han aumentado y se espera que suban todavía más debido a la larga duración de la recesión económica". La deuda externa neta (alrededor del 90% del PIB) y la posición negativa de inversión internacional "siguen estando próximas a sus topes históricos". Ello condujo en 2012 a la pérdida de confianza del mercado en los activos españoles y a una salida de capitales privados. "Pese a una reciente relajación, la confianza de los mercados financieros sigue siendo muy sensible a los acontecimientos económicos y políticos", apunta la Comisión.
El único indicador que ha mejorado mucho es el déficit por cuenta corriente, que ha pasado de cerca del 10% en 2007 a menos del 1% en 2012. Sin embargo, Bruselas alerta de que parte de esta mejora se debe al aumento de la productividad provocado por la destrucción de empleo y señala que ni siquiera la reducción de los costes salariales se ha repercutido en los precios finales. "Se necesitan más mejoras de competitividad para sostener el dinamismo de las exportaciones y la sustitución de las importaciones", señala el informe.
Finalmente, Bruselas dice que el déficit público sigue siendo alto y que la deuda, que alcanzó el 84% del PIB en 2012, "seguirá registrando aumentos sustanciales en los próximos años".