El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha reconocido que el Gobierno ha pedido grandes esfuerzos a las entidades financieras, que sin embargo repercutirán en la mejora de la confianza que, a su vez, compensará los esfuerzos hechos por los bancos.
Así lo ha señalado De Guindos el Foro Europa organizado por Nueva Economía Fórum, al ser preguntado por las críticas del presidente del Banco Santander, Emilio Botín, que la semana pasada criticó la derrama que impondrá el Gobierno a los bancos para compensar a los preferentistas.
Por otro lado, De Guindos se ha referido a los planes del Gobierno para el sistema financiero y ha asegurado que cuenta con una hoja de ruta que contempla la independencia de las tres entidades en manos del FROB, que, a su parecer, son muy solventes y tienen mucha liquidez, por lo que tendrán que cumplir con una función básica de la economía como la de dar crédito.
Según el ministro, estas tres entidades (Bankia, Novacaixagalicia y CactalunyaBanc) son de las "más solventes" tanto en España como en Europa y tienen una liquidez "enorme", por lo que en los próximos meses se verá cómo empiezan a dar ese crédito.
De Guindos ha reiterado que el Gobierno tiene planes para vender y privatizar estas entidades de aquí a cinco años, por lo que ahora hay que gestionarlas "lo mejor posible" para que puedan dar financiación hasta entonces.
Preguntado por el coste total de la recapitalización financiera para los contribuyentes, el ministro ha considerado "frívolo" dar una cifra, y ha explicado que el coste final dependerá de lo que se recupere con las privatizaciones de las nacionalizadas.
El ministro ha explicado que el crédito de 40.000 millones de la UE, que cuenta con condiciones muy ventajosas, equivale a 4.000 millones de deuda española británica a diez años con un interés por encima del 4%, por lo que al final se traduce en una subasta de una semana cualquiera.
En cualquier caso, el ministro ha asegurado que esos 40.000 millones no se han utilizado para rescatar a la banca sino a los depositantes y ahorradores, y ha añadido que si se hubiera dejado caer una sola entidad, el efecto en términos de confianza hubiera sido "enorme".
Además, el ministro ha recordado que el esfuerzo que han hecho los bancos, en términos de provisiones y de capital, superó los 115.000 millones en 2012, algo más del 11% del PIB, una tarea que se tenía que haber hecho antes. Este esfuerzo, a su parecer, ha supuesto una fuerte pérdida de beneficios, pero era "fundamental" para recuperar la confianza.
Asimismo, ha repasado la creación de la Sareb, que ha ayudado a un saneamiento importante de las entidades. "Estamos al final de un proceso que llevará a menos entidades, pero más solventes y fuertes", ha garantizado el ministro.
Según De Guindos, todo lo hecho en 2012 sitúa a España en una situación "inversa" a la del año pasado, cuando el país era el "mal alumno". "Hoy se percibe que el sistema bancario español, más allá de dificultades que pueden surgir por la recesión, está mucho mejor posicionado desde el punto de vista doméstico e internacional", ha señalado.