La Seguridad Social registró en enero un superávit de 3.141,81 millones de euros, lo que equivale al 0,29% del PIB, después de haber cerrado 2012 con una desviación negativa cercana al 1% frente al equilibrio previsto inicialmente, según datos del Ministerio de Empleo.
Este saldo positivo en enero, que no es del todo representativo al corresponder a un sólo mes, es el resultado de una recaudación de 11.792,32 millones de euros, el 9,12% previsto para el conjunto del año, que suponen un 5,86% más que en el mismo mes de 2012, y de unos gastos que se situaron en 8.650,51 millones de euros, que crecieron un 3,70% interanual.
Así, los ingresos han compensado el incremento de los gastos, principalmente por un aumento de las transferencias corrientes del 36%, hasta los 2.550 millones de euros, lo que supone alrededor de un tercio de los ingresos totales, ya que en enero se registró una caída de la recaudación por cotizaciones del 1,29%, hasta los 8.907,58 millones de euros, el 8,41% de lo previsto en 2013.
Destacan las caídas de recaudación por cotizaciones superiores al 95% en el Régimen Especial Agrario y en el de Empleados del Hogar, en parte por la integración de estos trabajadores en el Régimen General, que, en esta circunstancia y en plena caída de las afiliaciones al sistema, experimentó un incremento de los ingresos del 0,81%, hasta los 6.545.65 millones de euros.
Por el contrario, destacaron los incrementos de recaudación por las cuotas aportadas al Régimen Especial del Trabajo Autónomo (+6,34%), que permitieron ingresar 974,53 millones de euros, y por la cotización por cese de actividad de los autónomos (+37,43%), que aportó 12,2 millones de euros.
Por el lado de los gastos, destacó el gasto en pensiones, que ascendió a 7.607,25 millones de euros, un 4,67% más, con especial incidencia de los desembolsos en pensiones de jubilación, que alcanzaron los 5.205,25 millones, con un incremento del 5,57%.