Los ministros de Finanzas y los jefes de los bancos centrales del G20 advirtieron hoy de que los riesgos para la economía mundial han disminuido pero persisten, y que los ritmos de crecimiento siguen siendo demasiado débiles.
"Gracias a las importantes medidas políticas adoptadas en Europa, Estados Unidos y Japón, y la estabilidad de la economía china, los principales riesgos para la economía mundial han disminuido", se afirma en el comunicado final de la reunión ministerial en la capital rusa
Al mismo tiempo, la nota advierte: "De todas formas, los riesgos importantes persisten y los ritmos de crecimiento de la economía mundial aún siguen siendo demasiado débiles y los niveles de desempleo en algunos países son inaceptablemente altos".
El comunicado también pide aunar esfuerzos para fortalecer la unión económica y monetaria de la Eurozona, según las agencias locales. "En estas circunstancias se requiere aplicar esfuerzos consecuentes para fortalecer la unión económica y monetaria de la Eurozona", apunta.
Además, insta a "eliminar la incertidumbre relativa a la situación fiscal de EEUU y Japón e incrementar las fuerzas internas de demanda en los países con superávit en sus operaciones cuenta corriente, tomando en consideración las condiciones particulares de los grandes productores de mercancías".
Guerra de divisas
Por otro lado, los ministros de Finanzas y los jefes de los bancos centrales del G20 expresaron hoy su rechazo a participar en "guerras de divisas", ya que repercuten negativamente en la estabilidad económica y financiera. "Nos abstendremos de devaluaciones competitivas de divisas", se afirma en el comunicado final de la reunión ministerial en la capital rusa.
Los ministros destacaron que "la excesiva volatilidad de los flujos financieros y la desordenada dinámica de los tipos de cambio tienen consecuencias negativas sobre la estabilidad económica y financiera". "No vamos a orientar nuestros tipos de cambio hacia la competencia, vamos abstenernos de todas las formas de proteccionismo y mantendremos abiertos nuestros mercados", reza.
Además, el documento subraya su apoyo a "un avance más rápido hacia los sistemas de tipos de cambio de mercado y a tipos de cambio flexibles que reflejen los indicadores económicos fundamentales y permitan evitar desequilibrios permanentes de las paridades". El FMI y la OCDE negaron que las economías mundiales estén librando una "guerra de divisas" y defendieron la postura de Japón sobre la devaluación del yen.
Japón se ha granjeado un aluvión de críticas por su política monetaria expansiva para impulsar sus exportaciones y combatir la deflación. Pese a que desde noviembre pasado el yen se ha depreciado un 25 y un 17 por ciento en relación con el euro y el dólar, respectivamente, el ministro de Finanzas nipón, Taro Aso, ha refutado las críticas de sus socios comerciales.