Andalucía sufre el mayor índice de descontento laboral, descontento que se produce cuando no se encuentra el tipo de trabajo que se busca. Dicho de otro modo, hay una falta de adecuación entre la demanda de empleos que se prefieren y la oferta existente. En Andalucía, el descontento laboral alcanza nada menos que el 47%, el más alto de todas las comunidades autónomas y muy por encima de una media nacional que se sitúa en el 36,5%. Descontando a los parados, el descontento ha subido en España más de un 5 por ciento. Es el resultado del estudio "Avance del mercado laboral" correspondiente al mes de enero, elaborado por Analistas Financieros Internacionales y la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal, AGETT.
Esta tasa de descontentos laborales ha crecido más del doble en Andalucía respecto al inicio de la crisis económica, por cuanto entonces los descontentos laborales eran 750.050, un 20% de la población activa ajustada, y ahora casi llegan a los dos millones y suponen un 47%.
El descontento laboral es mayor en aquellas CCAA con mayor tasa de paro. Así, las regiones con un mayor peso de esta población son: Andalucía (47%), Extremadura (45,8%), C. Valenciana (44,1%) y Canarias (42,9%), frente al País Vasco (25,8%), Cantabria (27,2%) o Navarra (28,7%), con los menores indicadores. La media de descontentos laborales, teniendo en cuenta a los desempleados es del 36,5% a nivel nacional.
Si se extraen los desempleados del recuento total de los descontentos laborales, las regiones con un mayor índice de descontento laboral son la Comunidad Valenciana (16,7%), Extremadura (14,7%), Murcia (14,6%) y Castilla La Mancha (14%), todas ellas por encima del 14%, muy por encima de la media nacional, que se sitúa en el 12%. En el lado opuesto, regiones como Cataluña (8,5%), Asturias (9,7%), Cantabria (10%) o Galicia (10,1%), son las regiones con un menor índice de descontentos laborales, sobre el total de la población ajustada.
En la mayoría de los casos, los subempleados, y en concreto, los parciales involuntarios son los que tienen un mayor peso sobre los descontentos laborales. La Rioja, Cantabria, Comunidad Valenciana y Baleares, son las regiones donde más ha crecido el peso de los descontentos laborales desde el inicio de la crisis; Galicia, Cantabria y Murcia, las que menos.
El incremento desde el inicio de la crisis de esta población descontenta (excluyendo los parados) ha sido mayor en regiones como La Rioja, Cantabria (ambas +7,3 puntos porcentuales), y Comunidad Valenciana (+7,2 p.p.), mientras que en otras como Canarias (+4,1 p.p.) y Murcia (+4,3 p.p.) apenas se ha incrementado. Para el conjunto nacional, este incremento se sitúa en 5,15 puntos porcentuales.
Al igual que ocurre con el total, la mayor parte del incremento interanual de esta población descontenta se explica por el aumento del número de personas ocupadas a tiempo parcial con carácter involuntario, salvo en el caso de Castilla-La Mancha, donde es más predominante el incremento de otro tipo de subempleo (explica 2,7 puntos porcentuales de un incremento de 6,0 puntos porcentuales). Es destacable también el hecho de que Murcia sea la única CCAA que reduce en 1,4 puntos porcentuales, el número de subempleados por otras cuestiones que no sea trabajar a tiempo parcial de forma involuntaria.
El perfil del descontento laboral que trabaja como subempleado corresponde a mujer, con edad y nivel de formación medios. Además, si se eliminan a los parados, el nivel de descontento laboral de los subempleados se ha incrementado también respecto al inicio de la crisis en cinco puntos, aunque su porcentaje está en la media nacional.
El documento prevé que la Encuesta de Población Activa de enero la tasa de paro alcance el 26,13% en España, si finalmente la población activa desciende un -0,3% interanual. En total el paro superaría los seis millones de desempleados.