Los planes de saneamiento de las cuatro cajas nacionalizadas ya están aprobados definitivamente. Este miércoles, la Comisión Rectora del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha dado su visto bueno para finalizar la recapitalización de las entidades participadas por el Estado.
En total, dichas entidades (Bankia, Banco de Valencia, NovaGaliciaBanco, Catalunya Banc) presentan un agujero de 26.550 millones, pero el coste para el contribuyente ascenderá a 36.698 millones, puesto que no sólo se busca poner el contador a cero, sino inyectar algo más de capital para que las entidades sean viables y cumplan con los requerimientos legales. Además, a esta cantidad que hay que sumar las anteriores inyecciones llevadas a cabo por las administraciones y que, salvo sorpresa mayúscula, no se recuperarán.
Este dinerito fresco llega de Bruselas, que se lo entrega al FROB como parte del rescate financiero pactado poco antes del verano. Y hay que recordar que será el Estado el responsable ante la UE de devolver lo prestado.
Respecto al futuro más o menos cercano, la intención del FROB es sanear CayalunyaBank, NovaGaliciaBanco y Banco de Valencia y entregárselos a alguna entidad financiera que quiera quedárselos. En el caso del Banco de Valencia, será La Caixa la que lo adquirirá por un euro. En el caso de las otras dos excajas, todavía no se sabe dónde acabarán, aunque hay varios candidatos.
Bankia, por su parte, llevará algo más de tiempo. Es la única de las cuatro que se considera viable. El objetivo es inyectarle ahora dinero, sanear el balance y hacer que vuelva a ser plenamente operativa. Entonces, dentro de cuatro o cinco años en las previsiones más optimistas, llegará el momento de vender la participación del Frob y el objetivo es que se recupere la inversión inicial, aunque no será sencillo conseguirlo.
BFA-Bankia: el FROB estima, según los informes encargados a tres expertos independientes, que existe un agujero en la valoración económica de BFA-Bankia por un total de 10.444 millones de euros. De este importe total del grupo BFA, 4.148 millones de euros corresponden a la valoración económica de la entidad cotizada Bankia. Esta última cifra pone en peligro la inversión de los accionistas de esta última.
Según lo conocido este miércoles, el primer paso serán inyectar 17.959 millones extras a BFA. Con esta cantidad, quedará completo el proceso de recapitalización de esta entidad, que quedará en manos del FROB al 100%. Luego, llegará el momento de Bankia, que realizará una ampliación de capital con bonos convertibles contingentes (los famosos CoCo) por un importe de 10.700 millones, con los que enjugar esos 4.148 millones y generar capital extra para hacer viable al banco. Será entonces cuando se sepa cuál es la valoración de las acciones de Bankia, cuál es la pérdida que tendrán que asumir los accionistas y cuál es el porcentaje del capital que finalmente queda en manos del Estado.
Catalunya Banc: por su parte, las valoraciones económicas de Catalunya Banc han arrojado un resultado negativo de 6.674 millones de euros. En este caso, para recapitalizar la entidad y conseguir que llegue a los niveles de capital exigidos por las autoridades europeas, será necesario inyectarle 9.084 millones extra.
NovaGaliciaBanco: en este caso, el valor económico se ha cifrado en -3.091 millones de euros. Para sanear la entidad se seguirán varios pasos: en primer lugar, se insta a la conversión de las participaciones preferentes suscritas por el FROB en acciones ordinarias por valor de 1.162 millones. Luego, se reduce el capital a cero para absorber pérdidas. Y por último, el FROB tendrá que inyectar, mediante la suscripción de acciones, 5.425 millones de euros extra. Como en los demás casos, esta cantidad llegará en forma de aportación de títulos emitidos por el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE).
De esta manera, el FROB perderá las ayudas dadas hasta el momento: los 1.162 millones de la fusión y otros 2.465 millones en capital que inyectó en 2011. Hay que destacar que este esquema también provocará que los accionistas privados del banco (una veintena de empresarios gallegos) pierdan todo su capital. Y a los poseedores de preferentes se les aplicarán quitas en el primer trimestre de 2013.
Banco de Valencia: por último, esta entidad ya ha sido declarada como no viable en solitario y adjudicada a CaixaBank. Se ha obtenido un valor de liquidación negativo de 6.340,5 millones de euros. En este caso, la inyección de dinero en este momento asciende a 4.500 millones de euros. Es una cantidad que pierde el Estado y que se suma a los 1.000 millones ya aportados y al esquema de protección de activos de entre 300 y 600 millones pactados con el comprador. En total, los contribuyentes españoles se dejarán más de 6.000 millones en el agujero de esta entidad, controlada por Bancaja hasta su intervención.