El presidente de la Generalidad, Artur Mas, ha pedido al Gobierno un límite de déficit para las autonomías justo y leal, en consonancia con el margen que ha dado Europa al déficit de España, o Cataluña llegará al límite de lo que puede recortar y deberá tocar "temas básicos".
En la Diputación Permanente del Parlamento catalán para informar del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), ha argumentado que en los últimos meses España ha podido incrementar sus objetivos de déficit en dos puntos (lo que equivale a 20.000 millones de euros) porque Europa se lo ha permitido, pero en vez de repartir este margen entre todas las administraciones en proporción, "lo ha convertido en ahogamiento de las comunidades autónomas", que representan el 35% del total del gasto del Estado.
Así, ha lamentado que se está haciendo el ajuste en las corporaciones locales y autonomías, por lo que se ajusta en sanidad, educación y servicios sociales "por imposición", y cuando hay subidas de impuestos como el IVA, lo recaudado se lo queda todo el Estado.
"Es una actuación desleal e injusta del Gobierno, lo que ya dije en la conferencia de presidentes en Madrid hace dos meses, y para el año que viene todavía es peor", porque el límite de déficit autonómico se ha fijado en el 0,7%, frente al 1,1% previsto antes, que a su parecer tampoco era justo, lo que obliga a ajustes muy duros que no tienen sentido, ha remachado.
Asimismo, ha alertado: "Todo lo que sobrepasa el déficit, no lo financia nadie, así que si gastamos más, podemos entrar en una dinámica en la que gastemos más y no lo podamos pagar, porque el FLA no lo cubre" y el mercado ordinario está cerrado.
Ha señalado que el FLA solo sirve para afrontar el déficit autorizado, que no el convenido, pese a que "muchos de los compromisos de déficit vienen impuestos desde el Gobierno tras una aparente negociación que no es tal".
Ha incidido en que el FLA no es un regalo, sino un préstamo tres puntos por encima de lo que le cuesta la financiación al Estado, que en 2013 y 2014 supondrá para Cataluña un coste de 300 millones anuales en intereses, y a partir de 2015, cuando se empezará a amortizar capital, "de casi 1.000 millones anuales".
Con todo, y ante el cierre de los mercados de financiación exteriores, ha aseverado: "Tenemos derecho y necesidad del FLA porque fuimos los primeros en proponerlo y porque Cataluña aporta cantidades importantísimas de recursos netos al Estado".