"España ha hecho los deberes". Con esta frase, Ángel Gurría, secretario general de la OCDE ha pedido este jueves a la UE que apoye de forma decidida al Gobierno de Mariano Rajoy, dejando claro ante los mercados que se acudirá en rescate del país si éste lo pide y con la intensidad que sea necesaria.
En su opinión, el país está "mandando señales de confianza", por lo que "los socios europeos deberían hacer una declaración inequívoca de que en caso de que España pida un apoyo, éste será concedido". Hay que tener "lista la bazooka, con el dedo en el gatillo", a recalcado muy gráficamente, aunque también ha destacado que "esto no quiere decir que tenga que cambiar de mano un solo euro" puesto que en su opinión, el mero anuncio de que el BCE actuará y de que no se dejará caer a España, sería suficiente para hacer caer a los mercados.
"La señal de que su solicitud sería bienvenida y apoyada sería muy importante" ha asegurado Gurría, que asegura que España asume "una doble carga", porque de su éxito depende también la percepción de si el proyecto futuro del euro es viable. Además, el mexicano ha asegurado que "por primera vez, las piezas están en su lugar", lo que atribuye a las reformas del Gobierno. Aunque las cifrase aún son "malas, flojotas", las piezas están listas para darle un giro y empezar a movernos y quitarle presión a todo este ambiente.
Eso sí, en cuanto a si el Gobierno debe pedir de forma inmediata este rescate, Gurría asegura que "la decisión de cuanto usar el activo es de España". El Gobierno tiene "una bala de plata", sólo una, y hay que usarla con mucho cuidado para acertar en el blanco. Así, el tiempo lo define España, pero lo importante es tener absoluta certidumbre de que habrá apoyo.
En este sentido, la OCDE cree que la activación del programa de compra de deuda española anunciado por el BCE en septiembre "ayudaría a reducir" la prima de riesgo de la deuda, aunque a corto plazo existe un "riesgo sustancial" de que la financiación externa de la economía española, y "de manera notable los bancos", permanezca "interrumpida".
"Esto provocaría una profundización de la recesión (en España), especialmente si las medidas adoptadas a nivel europeo resultan ser ineficaces a la hora de suavizar las tensiones en el mercado interbancario y en los mercados de deuda soberana", alerta el informe.
El presidente del BCE, Mario Draghi, anunció a comienzos de mes un nuevo programa de compra ilimitada de deuda soberana de los países de la zona del euro con dificultades, que se llama Transacciones Monetarias Abiertas (Outright Monetary Transactions, OMT, por sus siglas en inglés). Este programa sólo se activará si lo solicita expresamente el Gobierno, cuestión que todavía está bajo análisis.
El organismo deja constancia del vínculo que existe actualmente entre los problemas del sector financiero y la deuda soberana, como muestra el hecho de que "el rating crediticio de la banca depende en su mayor parte del de la deuda soberana". En su opinión, se trata de un "círculo vicioso" que podría verse reducido una vez se complete la recapitalización con fondos europeos de la banca nacionalizada.