Se veía venir y así fue anunciado en Libertad Digital. Tras unos meses de forcejeo con sus trabajadores, la Ejecutiva de la UGT Andalucía ha decidido despedir a 20 de sus empleados aplicándoles la reforma laboral que dicen combatir en las calles y contra la que llamaron a la huelga general. Y lo ha hecho contra su propia sección sindical. El secretario general de la sección sindical de UGT-Andalucía, Francisco Serrano, dijo que lo que está sucediendo en la organización sindical en Andalucía, embarcada desde julio pasado en un plan de ajuste laboral, es algo insólito hasta ahora en el sindicato. La UGT es, para él, una patronal "casposa".
El representante de los curritos o trabajadores de base del sindicato, como lo llama ABC, entre los que no se incluyen los dirigentes, se queja de que la su "patronal", o sea, la comisión ejecutiva regional del sindicato, "esté olvidando los principios de la organización" a la hora de aplicar reestructuraciones entre sus empleados por motivos económicos. "Te aplican lo más duro de la reforma laboral como si se tratase de la patronal más casposa de España", afirma el citado portavoz, que este martes se manifestó junto a decenas de empleados de la central sindical en la Calle Salado de Sevilla, a las puertas de la sede regional de UGT.
Al día siguiente de la huelga 14-N
Al día siguiente a la huelga general del 14 de noviembre la dirección "echó a la calle" a 28 trabajadores fijos adscritos al programa de Fomento de Empleo, con 20 días por año trabajado, como establece la nueva norma laboral impulsada por el Gobierno de Mariano Rajoy para despidos objetivos.
13 de ellos trabajaban en las dos sedes del sindicato en Sevilla, la regional y la provincial. Precisamente, la dirección sindical aduce causas objetivas para aplicar el ajuste ya que el programa de Fomento de Empleo habría finalizado. Ello se relaciona con los recortes del Gobierno andaluz, que están repercutiendo directamente en las arcas de los sindicatos.
El comité que representa a la plantilla de UGT-A ha puesto una denuncia ante la inspección de trabajo por "presuntas coacciones" a trabajadores para que acepten modificaciones en su contrato de trabajo, y denuncia que la dirección está negociando individualmente con los afectados evitando la negociación colectiva.
Al respecto, se muestra comprensivo con la situación de asfixia financiera que atraviesa el sindicato por la reducción de ingresos, "como puede sucederle a cualquier empresa en España", y pide que se abra una negación para pactar los despidos "en condiciones mínimas de coherencia con los principios del sindicato".
320 trabajadores en el sindicato
Un total de 320 personas trabajan en UGT de Andalucía, descontando los 28 que han salido recientemente y los que están empleados en fundaciones adscritas, como Esculapio, también en pleno ajuste laboral. De la cifra total, 160 son fijos-discontinuos dedicados a tareas relacionadas con el Programa Orienta, y el resto, a sea otros 160, trabajan en la estructura orgánica del sindicato, es decir, en sus nueve sedes andaluzas.